Simple y complicado || InoAoi

19.- Reencuentro

- Es algo sobre mi... - hablaba lento, con pausas prolongadas, como tratando de encontrar las palabras correctas o buscando el valor para decirlas.

- ¿Eres alcohólica? – preguntó para tratar de agilizar el asunto luego de unos segundos de puro silencio que lo comenzaban a impacientar. Esa era una de sus tantas teorías, aunque debía admitir que era una de las menos probables.

- ¿¡Que!? – preguntó ofendida.

- Tus alucinaciones de "días nublados" y "hombres transparentes" son preocupantes...

- ¡No es eso, idiota!

- No tienes de qué avergonzarte... conocí a un par de vagos que lo eran, sé que puedes mejo...

- ¡Te digo que no! – lo interrumpió.

- Entonces dime...

- Ufff... es que no es fácil... - acariciaba el cabello de su larga coleta, estaba muy nerviosa.

- ¡Solo dilo y ya!

- ... - suspiró, abrió la boca, pero no dijo nada.

- ¿Tan terrible es? – preguntó escéptico, estaba seguro que no podría ser algo malo.

- Noo, claro que no, no es terrible... es solo... que...

- ...

- Es... bueno... es que... ten...

- ¿Eres feliz? – la interrumpió de nuevo.

- ¿Qué?

- ¿Eres feliz? – repitió - Sé que las cosas no resultaron como tú querías y quiero saber si a pesar de todo... eres feliz – ella pareció sorprendida por la pregunta, pero luego de pensarlo un momento sonrió como pocas veces la había visto, una sonrisa tan deslumbrante que le daba calidez a su corazón.

- Tienes razón, nada resultó como esperaba, pero sí, soy muy feliz – contestó con total seguridad.

- Entonces lo que tienes que decir no es malo y te aseguro que yo puedo hacerte aún más feliz – se cruzó de brazos con una sonrisa llena de confianza.

- Inosuke...

- ¿O acaso yo no te gusto?

- No somos niños Inosuke... tu no solo "me gustas" – confesó acariciando su mejilla - yo también siento algo más, más fuerte... contigo siempre todo es tan intenso...

- Entonces no me importa lo que tengas que decirme – susurró rozando sus labios.

Ambos se miraban a los ojos, tan cerca que podían sentir el aliento del otro y eso que Inosuke llevaba semanas esperando, pasó... sus labios terminaron de encontrarse en un beso tímido y suave. El primero fue de exploración, pero el siguiente estaba lleno de anhelo, sus besos eran hambrientos y apasionados, unos que llevaban demasiado tiempo queriendo volver a dar.

Desde que se reencontró con Aoi siempre la sintió ligeramente diferente, su olor se mezclaba ahora con el de un perfume sofisticado, su cabello estaba más largo, su forma de vestir era más madura, su cuerpo era el de toda una mujer. Había tanto por descubrir y no perdería ni un solo segundo para seguir conociendo a esta versión nueva de la chica que alguna vez conoció y a la que aún seguía amando.

Recorrió su cuello con la punta de la nariz y besó cada parte de su rostro, Aoi sonreía por las cosquillas y respondía cada toque con uno más intenso que el anterior. Inosuke agradeció que ella retirara los platos unos minutos antes, porque si no, habría dejado un desastre cuando sin importarle nada la recostó sobre la mesa y se abalanzó sobre ella besando sus labios con entusiasmo, Aoi gustosa suspiraba abrazándolo por el cuello.