28| Hello, Satan

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Erick no cambio de opinión ante las palabras de su padre, ya estaban ahí y era más que suficiente, años de planear lo irían a dar a la basura.

El mundo mágico comenzó a sufrir algo que catalogaron "Declive" esto por parte de los magos muggle y mestizos, mientras que por parte de los magos puros era un "Ascenso", algo que felicitaron uniéndose a las fila de Gallert.

El joven se había hartado que por años colocaran a los Ryddle por encima de su el y su familia, aquella tarde de lluvia ordeno que los últimos integrantes de aquella familia mestiza fueran llevados al callejón Diagon, en donde todos presenciarian su ejecución.

—No tienes que hacer esto— hablo Delphini mirándolo sintiendo la soja en su cuello.

Erick sonrio sin mirarla.

—Hago lo que se me plazca Delphini— se giro a verla— por años estuve debajo de ustedes, es hora de borrar su asqueroso apellido mestizo y que dea únicamente recordado el mio.

Victor soltó un risa sin gracia y Erick se giro a verlo.

—¿Que se te hace divertido? ¿Como puedes reír con una soja en tu cuello?

El pelinegro se encogió de hombros.

—Estoy a punto de morir, que ría o no, no cambiará mi destino.

Erick sonrio un poco y miro a Delphini.

—Ves, ¿Por qué no puedes ser como tu hermano y aceptar tu muerte?

El chico se dio media vuelta y la vo de la chica lo detuvo

—¡Erick, no puedes hacerme esto! ¡Yo te amo!

Una risa demencial salió de la boca de Erick, se doblo un poco mientras buscaba la respiración entre su risa, negó con la cabeza mirandola.

—Ay, Delphi, eso no te salvara de la muerte.

—Eres un maldito— escupió la chica.

—En parte, son varios adjetivos que me han colocado: maldito, perro, traidor y hasta me han dicho "Hola Satan"— negó con la cabeza acercándose a ella— Ningún adjetivo hacia mi podrá herirme Delphi, soy todo lo que dicen y las verdades no deben de dolerme— estiro su mano pero la chica se movió evitando que la tocara—Nos vemos en el infierno

—La muerte será nuestra recompensa— le sonrió Victor.

Erick lo observo.

—Si lo ves de esa manera, no hay obstáculo que te mate primero no?— estiro su varita y lo apunto— ¡Avada Kedavra!

El hechizo verde salio de la varita de saúco y mato de inmediato al joven Ryddle, Delphini grito y luego todo quedó en silencio, el hijo heredero de Tom Ryddle había muerto.

—Y tu—señalo Erick hacia Delphini, la joven se giro a verlo con lágrimas en los ojos— Tu me mentiste— se acerco a ella sin dejarla de apuntar— Tu muerte será más dolorosa que la de tu hermano.

Grindelwald movió la palanca que hizo que Delphini cayera al piso con la soja en su cuello, los ojos negros de la chica lo miraron con desesperación, movió sus pies en le aire buscando el piso que nunca encontró y tras varios minutos de angustia y dolor, Delphini falleció, sus ojos negros aún tenían reflejados el miedo que había sentido de morir.

Erick sonrio mirando su cuerpo.

—Ryddle, fuera— hablo.

Ahora nadie podría detenerlo.

AVADA KEDAVRADonde viven las historias. Descúbrelo ahora