✨9🌓

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Pasaba ya de la media noche. Vanessa había tomado de nuevo el turno nocturno, pero no estaba en su zona de vigilancia, esta vez estaba haciendo más... Trabajo de campo.

Moon se encargaba de sus rondas y los demás animatrónicos salían a vagar por ahí por lo que debía ser mucho más sigiloso. Nadie sabía que vagaba por ahí de noche.

Monty había obtenido el puesto de bajista de la banda principal y ahora era un miembro indispensable del grupo.
Bonnie no tenía reparaciones y no habían encontrado evidencia de quién pudo haberlo hecho. Se decía que un ladrón había entrado en la noche y lo había vuelto partes. Pero nadie vio la bestialidad de aquellos restos, pues quien lo había desmantelado era obvio que no era humano.

Pero nadie investigó a fondo, y Freddy, el más afectado, fue quien más mintió y fingió para que nadie se diera cuenta de cuanto le dolía.

Y es que dolía. Se sentía solo y vacío. Muy solo.

Bonnie. Su mejor amigo, su querer, su confidente, había sido desmantelado y, sin arreglo, mandado a la basura.

No podía odiarse más a si mismo en aquellos momentos, pero Monty tuvo lo que quiso y debía tratar de disfrutarlo y fingir que había sido solo un accidente del que no sabía nada.

Moon suspiró, alejando todos esos pensamientos de lo que acababa de repasar como "los hechos". Que consistían en un montón de archivos mentales mezcla de cosas que vio y escuchó en los últimos días.

En los últimos días que vio los ojos melaza y no rojos.
Pero eso no importaba ahora.

Debía concentrarse. Sus sensores avisaban de que en la guardería un pequeño acababa de entrar. Y estaba solo.

Caminó de nuevo hacia su área de trabajo. Todas las luces estaban apagadas por lo que tenía el control total de su cuerpo.

Era Jeremy Carheal. El menor de 3 hermanos. Tenía sólo 2 años y medio y no sabía a dónde debía ir ahora.

El pequeño jugaba con una pelota de plástico tan grande como la palma de su mano. Sin darse cuenta del peligro en el que se encontraba.
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—Niño travieso~ Estas no son horas de estar despierto jugando.

El niño se asustó ante la presencia del animatrónico con temática de Sol/Luna. Sabía hablar muy poco y era muy tímido, así que solo lo miró con sus enormes ojos verdes esperando que haría el otro a continuación.

El animatrónico se balanceó desde el techo hacia donde se encontraba el infante, inclinó su cuerpo hasta quedar cara a cara.

—Vamos a dormir~

Le ofreció una mano. El pequeño Jeremy, inocente y sin malicia alguna en su pequeño cuerpo, no sabía lo que aceptaba al acercarle esa mano con confianza para que lo llevase. Por qué lo llevaría a dónde nunca nadie podría volverlo a ver.

"No"

Sonó una voz desde el interior de Moon.

"No permitiré esto"

—¡El niño debe ir a dormir! —habló en voz baja el animatrónico intentando mantener el control de su cuerpo, pero cada vez resultaba más y más imposible.

Ante las contorsiones de MoonDrop los ojos del pequeño se llenaron de lágrimas de horror. Soltó la mano mecánica como pudo y salió corriendo lo más lejos que posible.

—¡NO! ¡NO! ¡NO HAREMOS ESO!

La fuerza en la voluntad de Sun era más grande que la de cualquier robot que uno conociera. Era fuerte. Mucho más que cualquier humano en más allá de un aspecto físico.

Eclipse Reptiliano =Glittergolf History=Donde viven las historias. Descúbrelo ahora