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LUCAS CRAFT
El tipo con unos reflejos impecables esquiva mi golpe con facilidad, haciéndome tambalear momento que aprovecha para empujarme hacia atrás, alcanzo a ver a otro tipo detrás de él, que se mantiene como un fiel observador, semi desnudo y sudado.
Joder. Mi corazón es estrujado con violencia.
¿Se está acostando con esos dos tipos? ¿Me superó así de rápido? ¿Ahora le van los tríos? ¿Ellos son ahora los encargados de darle placer a ella? ¿Ellos la están consolando?
El tipo pelirrojo me da un puñetazo en el pómulo y me da un portazo en las narices. Ni el golpe ni nada me detiene, comienzo a golpear la puerta con todas mis fuerzas, mientras grito:
—¡Melissa! ¡Joder sal Melissa!—los nudillos me duelen, mi respiración está muy acelerada, el sudor moja mi cuerpo—¡Melissa! ¡Melissa por favor!
Ella jamás sale, y no es hasta que me canso y me siento recargando mi espalda contra la puerta que alguno de los tipos habla tras los muros:
—Ella no te quiere volver a ver en su vida. La has perdido para siempre. Ella ya no está disponible. Y hazme el favor de irte o llamaré a la policía.
Sus palabras resuenan en mi mente y se clavan como espinas en mi corazón.
Sin ella, lo he perdido todo.
Siento un nudo atenazando mi garganta.
Amber jugó bien sus cartas y ha ganado. Le dije que el mal nunca triunfaba ¿y qué está haciendo ahora? Que esté en la cárcel no trajo devuelta a mi Meli. Pero al menos sufrirá. Conseguí que mis abogados le dieran la condena máxima de cinco años.
Pero aún así mi Meli no está conmigo.
No puedo hacer otra cosa que odiarme.
Abatido me pongo en pie. Recargo mi frente en la puerta y hablo con voz fuerte pero sin gritar.
—Meli, si estás ahí... quiero que sepas que nada fue real, ni tu beso ni lo que viste. Amber planeó todo, entró a mi ático ilegalmente y te hizo creer que estuvimos juntos. Eso jamás pasó. Ella está en...
—Llévate tus mierdas que no está escuchándote.
¿Cómo puede estar tan seguro?
No puedo más con esto, subo al coche y mi mejilla punzante es lo que me mantiene alerta en el camino de vuelta.
—Para, aquí—le ordeno a Thomas.
Él estaciona el auto frente al club swinger Outside, alguna vez vine acompañado de ella, ahora estoy sólo y sin nadie que me frene.
Todos esto meses me esforcé bastante en mantener mis insitnos sexuales a raya, el tiempo que ella tuvo el aborto me mantuve con una paja al día y ya. El ejercicio me ayudaba a tener todo controlado.
Pero ahora ¿cuál será mi motivación para hacerlo? Sin ella ya no tiene sentido ser mejor, ella está disfrutando de los cuerpos de dos tipos.
Sólo de imaginarlo quiero matar a alguien con mis manos, verlo morir frente a mis ojos. Pensar como la poseerán esos dos gorilas, como la harán gritar por más, ahora saliendo de su boca nuevos nombres, pronunciándolos suavemente casi como un suspiro. Enloqueciendo con otros cuerpos, rogando por más.
Háganme olvidar, la imagino diciéndoles.
Y yo no me voy a quedar regodeándome en la tristeza, en la soledad que me da su ausencia, si ella está aprovechando su tiempo para olvidarme ¿por qué yo no lo he de hacer?
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EL RESPLANDOR EN TU MIRADA © (Nuestras Miradas #3) [COMPLETA✔️].
Romance«Para apreciar la luz hay que conocer la oscuridad» -ANÓNIMO Primera publicación: 22/04/22 Ultima publicación: 26/12/22