EL RESPLANDOR EN TU MIRADA © (Nuestras Miradas #3) [COMPLETA✔️].

CAPÍTULO 15

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LUCAS CRAFT

Impaciente toco el timbre del pequeño apartamento hasta que una mujer de cabello largo crespo y despeinado con las puntas rubias, la cara demacrada y los ojos hinchados me abre.

Según el tipo de hace un rato—que por cierto ni siquiera pregunté por su nombre—me indicó que Sam su novio se encontraba en el apartamento de Melissa, junto con una de las amigas de ella.

Aquella mujer se sorbe los mocos y al fin habla.

—¿Quién eres?—pregunta antes de dejarme pasar.

Yo tomo una amplia bocanada de aire.

—Soy Lucas Craft.

—El novio de Melissa—añade ella por mí, y eso me pone melancólico. Melissa le dijo que soy su novio.—¿Tú sabes algo de ella? ¿Sabes dónde está?

«Si lo supiera no estaría aquí»

Niego con la cabeza.

Su cara se contrae y vuelve a llorar.

Sollozando me invita a pasar.

Cruzamos un pequeño pasillo que da a lo que supongo es la sala de estar, solo que esta carece de sillones, a pesar de que el apartamento no tiene muchos muebles el lugar se siente cálido.

En el suelo se encuentra sentado el mismo tipo pelirrojo con pecas que me golpeó la otra noche. Cuando éste advierte mi presencia se pone en pie.

Ambos nos miramos a los ojos muy orgullosos.

—Es el novio de Melissa—comienza a presentarnos la mujer de los ojos hinchados—Lucas él es Sam. El mejor amigo de Melissa.

El ambiente se siente tenso e incómodo, a pesar de ello Sam me ofrece su mano y yo sin querer verme grosero la acepto y estrecho con firmeza.

«Por mi Meli»

—Al fin podemos presentarnos como se debe—comenta Sam, que ahora sé que es el mejor amigo de mi Meli, de seguro él la ha ayudado durante mi ausencia.

¿Debería estar agradecido?

—Un gusto... Conocerlos a ambos.

Los dos toman asiento en el suelo.

—Por cierto yo soy Meredith, soy una vieja amiga de Melissa, nos conocemos desde la universidad.

Yo asiento con la cabeza y con un poco de dificultad por mi corpulencia consigo sentarme a su lado.

—¿Cuándo fue la última vez que supieron algo de ella?—pregunto para romper el hielo y al mismo tiempo poder recabar algo de información.

Un grave error, Meredith comienza a llorar desconsolada y Sam la abraza.

—Desde la mañan de ayer, Meredith dice que como todos los días ambas fueron a sus respectivos trabajos, pero que en la noche ella no volvió de ahí, su móvil está muerto y no podemos contactarla.

—¿Ella te regaló el collar?—inquiero un poco más brusco de lo que pretendía.

Su rostro muestra confusión, hasta que luego lo recuerda y sonríe.

—Mel no quería tener nada que le recordara a ti, y sí, el collar me lo regaló ella.

Cierro los ojos con fuerza.

—Si no lo hubieras aceptado y ella lo hubiera conservado podríamos haberla rastreado.

—¿El collar tenía un rastreador?—no sé por qué parece asombrado.