- I'm going to spend Christmas with her (voy a pasar la Navidad con ella) - terminó de romperme el corazón - I have to spend Christmas with my girlfriend (tengo que pasar la Navidad con mi novia).
- No - negué con la cabeza, apenas me salía la voz.
Ni siquiera intenté retener mis lágrimas, sabía que toda la presión en mi pecho tenía que salir por alguna parte. Mis manos temblaban, no podía recuperar el control de mi cuerpo, mucho menos controlar mis reacciones.
- No, no, no - insistía sin pensar - Ben, please no, you can't not leave, please (Ben, por favor no, no te puedes ir, por favor).
Solté la caja de Swarovski y me aferré a Brereton. Mis manos buscaron agarrarse de cualquier cosa que les diera un mínimo de firmeza hasta que dieron con el reborde de su polera.
Él no decía nada.
- I can't (no puedo) - admití - I can't stay here, I can't stand it anymore (no puedo quedarme aquí, no puedo soportarlo más).
Me apresuré en recoger mis cosas, a tientas encontré mi teléfono que estaba bajo un montón de cintas de regalo y me crucé la carterita que tenía colgada del respaldo de la silla. Ben me miraba sin comprender mi reacción.
- I'm sorry (lo siento) - susurré con lo poco de cordura que me quedaba.
- Claire, wait, what...? (Claire, espera, ¿qué...?) - se puso de pie, pero yo ya me había alejado un par de pasos - What are you doing? (¿qué estás haciendo?)
"Me estoy yendo", quise decir, mas solo me importaba alejarme de ese lugar.
- Claire! - lo escuché a lo lejos detrás de mí.
Iba a alcanzarme y no podía permitírmelo. Tomé del brazo a un chico que pasaba por mi lado, hablé sin pensar:
- Oye, ese que está parado ahí es Ben Brereton.
- ¿En serio? - me miró sorprendido.
Asentí mordiéndome los labios por la culpa. Esto era lo último que yo hubiera hecho, era mi último recurso. Varias veces me había prometido a mí misma que jamás dejaría que la fama de Ben se interpusiera en nuestra relación, pero digamos que él tampoco había sido de lo más honesto conmigo.
"No quería llegar a esto, Ben, pero tú me obligaste".
Me despejé las lágrimas con brusquedad y agarré mi carterita con firmeza para ir a tomar el metro. Me di vuelta una última vez, lo vi angustiado entre medio de tanta gente que le pedía fotos y tironeaban de su ropa para conseguir un autógrafo.
- Perdón - dije con el corazón roto, pero él estaba demasiado lejos como para oirme.
No sé cómo llegué a mi departamento. De pronto me encontré frente a la puerta y recordé cuando Ben vino aquí por primera vez.
"No ahora, por favor", pensé, ya había tenido suficiente por hoy, no iba a soportar otro recuerdo.
- Por favor, no - me dije con un hilo de voz, y de pura rabia contenida comencé a golpear la puerta apenas entré.
El corazón me quemaba y sentía que un montón de bichos recorrían mi pecho. Dejé escapar un grito de angustia, y luego otro, y luego se mezclaron con mis lágrimas. Me enterré las uñas en la clavícula en un intento por disipar esta sensación transfixiante pero no hubo caso.
Caminé con torpeza hasta mi cama y me dejé caer para hacerme un ovillo. Me llevé las rodillas al pecho deseando desaparecer, convencida de que esto no acababa de pasar y que mañana todo estaría igual que siempre, me encontraría con Ben para nuestras clases privadas, le daría un beso al terminar el baile y luego vendríamos a mi casa a mirar documentales de NatGeo.
![](https://img.wattpad.com/cover/297581024-288-k631798.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Descalza (Ben Brereton y tú)
Hayran KurguEn un mismo teatro puedes oir las pisadas de unas zapatillas de ballet y unas botas de fútbol, donde una bailarina interpreta historias de amor con el corazón roto, y un futbolista aprende que bailando puede reparar el suyo. A la Clarita no le gust...