I Remember Years Ago♥

Capítulo #40.

LAUREN POV.

Ya no habíamos vuelto al trabajo porque nos dieron permiso de faltar para inscribirnos, ahora estaba acostada en el sofá de nuestro departamento y comiendo un trozo de pizza de jamón con chorizo que era una de mis favoritas.

¿Qué hice después de que Camila me dejó hablando sola como estúpida?

Bueno, me fui de ahí obviamente, pero es que no era para nada mi culpa que Lucia se haya tropezado con el pie de Dinah y haya caído directo encima de mí, juro que voy a pedir el video a la facultad para enseñárselo a la loca de mi novia. Iba a esperarla, pero no, ella me dijo que no quería hablar y lo había respetado. Así que mi conciencia estaba tranquila por ahora. Tiene razón al decirme que yo no le pongo un alto a Lucy, pero ¿Qué podría decirle? Lucy cuando te caigas procura no caerte encima de mí o, Lucy trata de no verme cuando mi novia esté cerca. Era imposible y absurdo que le pidiera eso, pero como siempre la que tiene la culpa soy yo, pero cuando ella andaba con los ojos bizcos de Shawn yo me molesté, pero un poco. Y es que a mí me daba miedo perder a Camila porque es la chica más hermosa de todas, es mi mundo y no quiero estar sin ella.

No sé en qué momento fue, pero me quedé profundamente dormida. Al despertar la televisión estaba apagada y yo tenía una manta sobre mi cuerpo lo que significaba que mi novia estaba en casa. Quité la manta de mí y fui a buscarla a la habitación, pero no la encontré ahí, caminé hasta la habitación de invitados y ahí estaba hablando por teléfono con alguien que no sabía hasta que escuché su nombre pero ella no me había visto.

—Dinah yo sé, pero no sabes cómo me molesta y ya sé que es un tema muy repetitivo y que debo ser más segura de mi relación con Lauren pero te juro que siempre pienso que me la pueden quitar en cualquier momento, Lucía trabaja con ella y la puede ver más tiempo que yo y aparte lo que me dijo m...—giró su vista y me vio de pie en el marco de la puerta —te hablo después Dinah, adiós.

—Lo siento mucho no quería escuchar nada, sólo estaba buscándote.

—No me importa —limpió su cara disimuladamente para evitar que la viera llorando.

—Creo que debemos hablar, pero no quiero decir algo estúpido y que nos enojemos de nuevo.

—No quiero hablar ahora, quiero dormir ha sido un día muy largo.

—Se hará como tú quieras, ¿quieres que pidamos algo para comer?

—No tengo hambre, me voy a dar una ducha —se levantó y ni siquiera pude mirarla porque salió rápidamente sin darme la oportunidad de besarla. Era obvio que hoy no hablaríamos ni solucionaríamos nada así que preparé un sándwich de pollo y serví un vaso con limonada mirando mi teléfono y hablando con mi padre por mensaje ya que no quería hacerle sentir más culpa a Camila. Fui hasta nuestra habitación y Camila terminaba de ponerse su pijama que consistía en una simple camiseta mía que le quedaba larga, pero me dejaba ver el inicio de sus hermosas piernas que ahora les aplicaba esa crema de almendras que tanto me gustaba el aroma. Me pasé de largo a la ducha y el agua comenzó su trabajo a relajar mis músculos y eso me hacía pensar en muchas para ya no cagarla más con ella. Al salir me vestí al igual que ella sólo con una camisa y en bragas, ella ya estaba durmiendo boca abajo y yo hice lo mismo sólo que de espaldas a ella. 

Era demasiado incomodo porque siempre dormíamos juntas pero abrazadas o ella acostada en mi pecho, pero no, ahora sólo se escuchaba el sonido del aire acondicionado. Esperaba que mañana fuera un día mejor.

CAMILA POV.

Tuve una noche terrible, aunque pude dormir un poco no logré quitar mis malditos pensamientos que me atormentaron toda la noche y lo peor que Lauren estaba resintiendo todo lo malo que me pasaba. Mi teléfono vibró y un mensaje apareció en la pantalla.

Piénsalo y me avisas.

Papá.

Miré mi teléfono 5:28 am, no quería despertar a Lauren así que salí de la cama y fui hasta la cocina a preparar un buen desayuno, me coloqué mis auriculares y prendí la música en mi teléfono, tenía que distraerme y esto parecía buena idea. Preparé huevos revueltos con pan tostado y algo de tocino, a Lauren le encantaba, puse dos tazas de café y lo serví, puse la comida en ambos platos y cuando estaba a punto de poner la mantequilla al pan, sentí sus manos alrededor de mi cintura y como se quedaba quieta sin hacer nada probablemente no sabía si seguía molesta o no.

—Buenos días, amor —me dijo al oído y sentí su aliento en mi oído, los panes estuvieron listos y me di la vuelta para verla.

—Hola amor —sus ojos miraron mis labios y levanté su barbilla con un dedo acercándola a mí y dejando un corto beso en sus labios —preparé nuestro desayuno, siéntate Lau —quité mis auriculares y los puse sobre la mesa.

—No tenías que hacerlo amor, gracias nena.

Comimos tomadas de la mano y dándonos besos en ocasiones, no quería retomar el tema de nuevo porque lloraría y no quería eso ya, así que lo evité. Terminamos de comer y ella se acercó a mí poniéndose de rodillas, tomó mis manos y dejó un beso en cada una, tomó mi rostro y se acercó poniendo sus manos sobre mis mejillas acariciándolas y uniendo sus labios con los míos besándonos profundamente, no recordaba cuando extrañaba tanto sus labios y cuando su lengua entró en mi boca me perdí en su sabor y de nuevo en sus ojos cuando nos separamos y unió su frente a la mía.

—Te amo —le dije y ella dejó besos cortos en mis labios abrazándome contra su cuerpo, me cargó en sus brazos y nos metió a ambas a la ducha, y como en otras ocasiones donde acabábamos teniendo sexo, pero no, en esa vez me desnudó a punta de besos, admiraba mi cuerpo y dejaba besos por todos lados. Ella se sacó la camisa y la ayudé a bajar sus bragas, encendió la ducha y ambas nos estremecimos al sentir lo frío, pero al regularse la temperatura, pasó la esponja por mi cuerpo, la pasó por mis pechos delicadamente mientras me besaba los labios y yo enjabonaba los suyos también. Cuando terminamos salimos y Lauren estaba pegada a mi espalda y con sus brazos sujetándome de la cintura mientras avanzábamos hasta sacar algo de ropa. Lamentablemente teníamos que trabajar y en la noche a la universidad, pero no importaba porque estaría cerca de ella.

Después de unas horas por fin ya estábamos dentro del coche en camino a mi trabajo, en mis manos llevaba las carpetas con los documentos que me faltaba entregar a mi jefe. Llegamos a mi trabajo y Lauren tomó mi cara de nuevo besándome profundamente.

—Te voy a extrañar Camz, pero sabes que te amo y que nada ni nadie me va a hacer pensar lo contrario te lo juro, ¿me crees? ¿Confías en mí?

—Si te creo Lern, perdo...—fui interrumpida por ella.

—Nada de perdón, te amo y vengo por ti más tarde nena.

—Te amo —dejé un beso en sus labios y salí del coche esperando que nada cambiara y que ella me amara para siempre.

LAUREN POV.

Dejar a Camila en el trabajo se me hacía cada vez más triste pues quería estar con ella todo el tiempo y más si llevábamos horas peleadas y sin poder hablar todavía, entendí que no quiso hablar y ya no presioné, pero suponía que hoy por la tarde hablaríamos hasta resolver nuestros asuntos porque no me gustaba estar en esta situación y a ella tampoco. Aparqué en el estacionamiento de mi trabajo y al salir a la puerta principal me encontré con la persona que menos me esperaba.

Mi madre.

—Hola Lauren, ¿podemos hablar?

Oh no, creo que esto no tendría nada bueno.