Детонирующий || Kookmin

X: НАЧАЛО КОНЦА.

¿Qué se hace cuando sabes que el peligro está respirando en tu cuello? Ansioso por morder para matar y degustar con delirio y gozo cada gota de sangre derramada. El peligro, tiene un efecto en nosotros, los seres humanos, tales como podemos describir el aumento de la frecuencia cardiaca, las respiraciones superficiales convirtiéndose en un bucle repetitivo y veloz, los músculos se contraen listos para actuar y sientes el sudor frío deslizar por tu cuello trazando diferentes caminos en tu espalda, y por último, pero no menos importante, los temblores de las extremidades. La ansiedad que atraviesa el cuerpo humano en esos momentos, es tan grave, que el mismo cuerpo comienza a gritar por ayuda.

—Desnúdate.

Mirar a los oscuros ojos de Jeon Jungkook nuevamente provocó una nueva se sentimientos revueltos dentro de Park Jimin. Sentimientos malos que tienden a dar consecuencias malas.

Sin embargo en éste retorcido mundo... ¿A quién carajo le importan los sentimientos?

—¿Qué vas a hacerme?— preguntó Jimin con temor palpable en la voz.

—Quítate la puta ropa y cierra la boca—Jungkook habló con voz baja y tranquila al mismo tiempo en que alzaba una de sus manos para apretar el rostro de Jimin, su dedo pulgar e índice presionando las respectivas mejillas de ese pálido rostro—. No hables a menos que yo te lo ordene... de lo contrario con mis propios dientes te arrancaré la lengua, ¿me comprendes?

Al tener un asentimiento como respuesta, soltó el rostro de el pelirosa con brusquedad y se puso de pie. Sin dejar de mirar a Jimin, quien empezó a desnudarse con duda, retrocedió con pasos lentos hasta que su espalda chocó con una de las puertas de la habitación y con puño cerrado golpeó rítmicamente la madera blanca. Pronto se escuchó la cerradura ser abierta por una llave y en segundos, tres hombres trajeados empezaron a arrastrar diferentes maletas medianas y otras grandes completamente negras y metalizadas. Todas con grandes candados plateados.

La desnudez de Park Jimin quedó a la vista del joven jefe, quien en completo silencio estaba observando su cuerpo sin vergüenza alguna, y a los trabajadores que entraban. El mayor juntó ambas manos delante de su pelvis para tratar de tapar su intimidad y desvió su cabeza hacia un lado. más por el rabillo del ojo, observó cómo un hombre le extendía una botella de vidrio verde hacia Jungkook antes de inclinarse hacia él y susurrarle algo.

—Retírense y vuelvan a cerrar la puerta.

Cuando su orden fue ejecutada y nuevamente el cuarto quedó en silencio, el joven jefe caminó para encontrarse con su desnuda víctima. Al estar a unos centímetros pudo apreciar la piloerección en la piel de Jimin, estaba más que claro que el frío no era el causante de eso. Eran las emociones intensas que ahora mismo Park Jimin estaba experimentando y Jungkook estaba debatiendo en su cabeza acerca de ellas. ¿Cuáles serían?

¿Miedo, quizá?

¿Ansiedad?

¿Pánico?... ¿Jimin será una persona presa fácil del pánico a cualquier situación extrema?

Jungkook lo iba a averiguar en unos minutos.

La nariz de Jungkook se deslizó libremente por el cuello ajeno, la piel estaba caliente y eso era lo primero que le encantaba sentir en sus víctimas. La piel caliente es el sinónimo del buen o excesivo flujo sanguíneo en el cuerpo humano, sinónimo de que estamos vivos. Y lo que le hizo elevar sutilmente las comisuras de su boca fue el estremecimiento que percibió del otro cuerpo. Suspiró audiblemente antes de pasar de largo y acercarse a la mesa que sostenía el cráneo de Ji-hu para dejar la botella cercana cercana al hueso, después fue a uno de los cajones y del bolsillo de su pantalón sacó una llave plateada y gruesa, que tan solo a la vista se podría decir que pesaba, cuando el arco del candado de la maleta pequeña se abrió y cayó al suelo con un sonido tosco, Jungkook descubrió el interior de aquella maleta.