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― Hice algo de té― Le dio las gracias e hizo un espacio en la cama para que ambos se sentaran en esta con las tazas.

Hablaron lo que parecían haber sido horas. Ambos se llenaron de energía con la presencia del otro. 

― Espera, ¿tenías un grupo de baile en la escuela? ― Yoongi hablaba sorprendido, su interés era genuino. Por eso mismo había hecho que el menor tuviera su cara del mismo color que su cabello.

― No es para tanto... ¿Tú que hacías en la escuela? ― El pelinegro pensó unos segundos, no habían muchos recuerdos lindos que compartir.

― No mucho, iba a una escuela masculina así que solo tocaba el piano en la sala de música hasta tarde, comía zanahorias con mi mejor amigo y podía meterme en problemas de vez en cuando si estaba muy aburrido.

Hoseok rio, si se podía imaginar a Yoongi siendo un chico "problemático" en la escuela. 

Pasaron algunas horas hasta que Hoseok finalmente tuvo que irse. Despidiéndose de  Yoongi en la puerta de su casa. 

― Que te mejores Hyung ― Yoongi sonrió y se empinó a penas un poco para darle una caricia en la cabeza al menor.

Cuando la visita terminó, Min se dio la vuelta para volver a la cama; frenó sus primeros pasos al notar una rosa sobre la mesa. Tenía una nota adherible con un sol dibujado en el centro.

Sonrió enternecido y siguió su camino, no sin antes poner la rosa en algo de agua.

Winter RoseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora