Dama de Honor • Jimsu

7. fiesta

YoonGi pudo escuchar la música incluso antes de bajarse del auto. Era una combinación entre electropop y house, que odiaba. De por sí, pudo imaginarse la incomodidad que sentiría adentro, escuchando decibeles que seguro lo dejarían sordo y que horas más tarde lo dejarían con un pitido en el oído.

A diferencia de él, los amigos de JiMin se veían ansiosos por entrar, sobre todo TaeHyung quien, en reiteradas veces, había mencionado que ese club nocturno era su punto favorito. YoonGi no le prestó mucha atención, solo llegó a entender vagamente "Y la cambian todos los sábados" ¿A qué se refería? No tuvo la más mínima idea.

Sus palmas sudaron frío, teniendo que pasarlas una y otra vez por la tela de su pantalón. Como deseó fumar un cigarrillo en es ese momento.

—YoonGi hyung ¿Te sientes bien? —TaeHyung estaba parado afuera del auto, sosteniendo la puerta, expectante a lo que el rubio hiciera. YoonGi se percató que era el único que quedaba en el taxi, asintió levemente antes de salir, agradeciendo al conductor. El frío otoñal le azotó la cara haciendo a su cuerpo tiritar un poco. La tela de su chaqueta no ayudando mucho. De forma repentina sintió un brazo sobre sus hombros invadiendo su espacio personal.

—¿Nervioso hyung? —Preguntó TaeHyung mientras caminaba con el rubio hacia la entrada para alcanzar a los demás. Pudo observar una gran fila de personas esperando a ingresar a lugar.

—Solo es el frío.

—Adentro ni lo vas a sentir, créeme, estoy seguro que entrarás en calor ni bien comience el evento porque hoy es noche de retos—Lo miró con una sonrisa pícara.

Cuando llegaron hasta los demás, esperaron separados de la fila mientras que Hoseok les daba sus nombres a los vigilantes.

—¿Qué es eso? —YoonGi levantó una ceja interesado.

—Ah hyung, se nota que no me escuchaste cuando estaba hablando en el auto—TaeHyung fingió estar ofendido con un puchero, aún con el brazo rodeando a YoonGi—No te preocupes puedo volver a contarte, este club nocturno cambia de temática cada sábado y hoy es noche de retos, según lo que leí en su página, perooo tienes que experimentarlo por ti mismo para que entiendas a lo que me refiero.

YoonGi no le respondió nada. Intentó imaginarse lo que le contó el castaño, pero reacio a cualquier tipo de participación. El consideraba que solo los mocosos, estarían interesados en seguir tal estupidez.

—Chicos—les dijo Hoseok alzando la voz para ser escuchado por el grupo con un asentimiento de cabeza—Ya podemos entrar, vamos.

Lo primero que notó YoonGi cuando puso un pie dentro del lugar, era que TaeHyung, en efecto, tenía razón. La oleada de calor que lo azotó fue un cambio drástico de temperatura en su cuerpo. El club nocturno era bastante amplio y sobrio en cuanto a la decoración. Tenía una pista de baile en el centro donde las personas se movían unos pegados a otros. Algunos pasando la línea entre lo sensual e indecente. Habían luces de colores en todo el lugar, que parecían vibrar con el ritmo de la música.

Y oh la música.

Tan fuerte que la única forma de hacerte escuchar era si hablabas a gritos o te acercabas lo suficiente para hablarles al oído. Se quiso ir. Darse media vuelta, llamar a NamJoon para que lo recogiera, e ir a un bar tranquilo de por ahí.

Vigilar a JiMin. Todo por Dahyung. Impedir la boda.

Se repitió varias veces como si fuera un mantra solo para mantenerse cuerdo.

—¡Vamos a la barra! —Gritó Jin señalando hacia la gran sección con un estilo 360—¡Seguro Jiminie nos está esperando allí!

Los demás asintieron y se dirigieron a ese lugar. En el trayecto YoonGi notó que, en el fondo de la discoteca, una pantalla led gigante mostraba en letras neón: