Dama de Honor • Jimsu

9. Arte

Todos llegaron a la gran casa que prestaba los servicios para eventos, sobre todo bodas. Cuando YoonGi entró, tuvo que darle créditos a la señora Park, pues a pesar de tener una actitud insoportable, tenía buen gusto. La casa era realmente hermosa tanto por dentro como por fuera. Una gentil señora los recibió a todos para dirigirlos a lo que era un amplio jardín con algunas esculturas estilo greco romano y flores silvestres de decoración. YoonGi no pudo evitar sacar algunas cuantas instantáneas que guardó en el bolsillo de su pantalón.

—¿Y la galería? —Preguntó la señora Park mientras recorrían un caminito empedrado que se dirigía a otro pequeño jardín—Me dijeron que tenían una exhibición de arte aquí.

—Esta adentro de la casa señora Park, pero primero podemos ver el jardín con la fuente, donde se llevaría a cabo la ceremonia—Al mencionar esto los ojos de la madre de JiMin se emocionaron, a lo que asintió fervientemente jalando del brazo a la señora Kim.

—Si, hay que ver eso ¿Vamos cariño? —Le instó a su esposo y a su hijo.

JiMin por un lado los siguió de mala gana, manteniendo una distancia entre el pequeño grupo con las manos en los bolsillos. Dahyung le dio una mirada de ayuda, a lo que él solo pudo encoger sus hombros. No podía darles la contra a sus padres.

Aunque al notar, que el rubio se había escabullido al interior de la casa, no pudo evitar seguirlo.

—¿Sabías que son réplicas no? —Dijo muy cerca al oído de YoonGi, ocasionando que diera un respingo y que la foto que tomaba se arruinara—Perdona ¿te asusté?

YoonGi se volteó con el ceño fruncido, sosteniendo una foto desenfocada, de uno de los cuadros en la pared. La cara de burla del contrario aumentó su mal humor.

—No finjas arrepentimiento

—Es verdad—JiMin miró a sus espaldas sin poder divisar a los demás y respiró más tranquilo—Tengo que admitir que me gusta sorprenderte

—¿Así como lo hiciste ayer en la noche? —YoonGi bufo por la nariz y se alejó del pelinegro para ver otras pinturas. La mayoría siendo réplicas de otros artistas europeos, al igual que esculturas en menor escala.

La exhibición tenía como temática toda la historia del arte desde la época clásica, hasta los contemporáneos de la revolución industrial. YoonGi entró a un salón al azar y se quedó mirando la pintura más grande que había allí, de aproximadamente dos metros. Sabía que era una réplica, pero de todas formas le pareció increíble, como el artista logró hacerlo igual al original.

—¿Sabes de quién es?

YoonGi se tensó por la voz del pelinegro. Fingió no tener reacción alguna. Todavía el beso seguía en su mente junto con miles de preguntas sin respuesta.

Asintió sin quitar la vista de la pintura.

—Monet—Dijo bajito—No es mi favorito pero a mucha gente le gusta y supongo que eso lo hace un pintor importante.

JiMin no le respondió, por lo que pensó que lo había dejado solo, aunque cuando volteó su cabeza lo vio observando el cuadro con detenimiento junto a él. Las manos en los bolsillos con los ojos paseándose por cada pincelada. No se dio cuenta que lo había estado mirando, hasta que el pelinegro posó sus ojos sobre él.

Era la segunda vez en el día que se encontraban en ese juego.

YoonGi quito rápidamente la vista. Sus manos empuñándose a sus costados, sin poder evitar el golpeteo de su corazón en su pecho. El pelinegro decidió hablar.

—Monet es un artista que utiliza el realismo, tiene una técnica impecable donde logra plasmar texturas y jugar con la luz de forma increíble—Hizo una pausa, quitando la vista del mayor—Entiendo porque les gusta a muchos. Monet pinta la realidad como si fuera un sueño, lleno de familias burguesas de la época en grandes jardines tomando el té o merendando. No niego que sus pinturas sean bellas, pero a veces son solo eso. Su necesidad por pintar las cosas tal y como son deja de lado las emociones...el sentimiento ¿No sé si me dejo entender?