- Dime que ese no era tu padre. – Suplicó Ashley al ver la tensión que había quedado en la atmósfera de la casa.
- Si era él. – Respondí inexpresiva.
- Oh...toma. – Dijo Ashley facilitándome una caja cuadrada envuelta en papel de regalo con pantis dibujadas.
- Siempre tan...Ashley. – Jugó Richard para animar la situación.
Rasgué el papel para descubrir su interior, era una caja con un teléfono celular en su cara, la abrí para revelar el aparato tecnológico, vislumbre el rostro de mi amiga que me miraba sobreexcitada.
- Una chica de hoy debe tener uno. – Dijo extendiendo los brazos esperando un abrazo. – Me tomé el tiempo de agregar mi número – Agregó guiñándome el ojo, me acerqué a ella agradeciéndole y abrazándola, entonces vi a todos mis compañeros del bachillerato en el exterior de la casa esperando entrar.
- ¡SORPRESA! – gritaron todos al unísono.
- Ashley te dije que no quería una fiesta, quería estar sola, sola con ustedes. – Repliqué por lo bajo.
- Ay no inventes, estos te ayudará a despejarte ¡Por Dios Aline son dieciocho! – Insistió Ashley.
Cayó la noche y todos nos encontrábamos en el patio de mi casa, varios chicos ebrios se habían lanzado a la piscina, otros vomitaban sobre la nieve y algunos reían incontrolablemente tras haberle dado una calada a un porro de marihuana, yo estaba harta, Ashley no dejaba de besarse con Douglas mientras Susan triunfaba con mi ex, que había tenido la osadía de aparecerse con el grupo de las ex porristas, mis tíos se habían ido a su hotel hace tres horas atrás. Tomé asiento al borde de la piscina acompañada de Richard, que había pasado un brazo por mis hombros cubriéndome del frío, quería que todos se fuesen, y quedarme a solas, solo con mi primo, la música se erguía en la inmensidad, provenía de las bocinas de un equipo estéreo que no sabía de donde había salido, alguien cayó a mi lado salpicándonos con agua helada, Richard furioso, sacó al causante por los pelos y lo llevó a la salida de la casa, al cabo de unos minutos volvió con una toalla y me la pasó por los hombros.
Fueron pasando las horas y los invitados por Ashley fueron yéndose hasta quedar reducidos a Douglas, Susan, Carlos (Mi ex), Richard, y yo, había empezado a nevar haciendo que todos pasáramos al interior de la casa, sobre la mesa comedor, estaban los restos de la torta que había traído mi prima hace unas horas atrás, los invitados hambrientos habían acabado con ella, me lancé en el sofá para ver como Carlos, moreno, alto, con esteroides en las venas, besaba a mi prima sin ningún recato, la cara de Richard estaba tan roja que parecía que iba a explotar en cualquier momento, Ashley me indicó que subiría a mi habitación con Douglas, acepté con el alivio de que la perdería de vista por unos minutos, tomé el celular y empecé a explorar los menús y sus aplicaciones, de pronto se escuchó un golpe, vi como Carlos caía al suelo y era arrastrado por mi primo hacía el exterior, Susan gritaba histérica golpeando la espalda de su hermano, simplemente me regocijé en el placer de verle la cara rota a la bestia de mi ex y seguí jugando con el celular.
- ¡Eres un animal! ¿Por qué hiciste eso? – Gritó Susan manoteando en el aire.
- ¿No ves que te estaba tratando como una mujerzuela? – Respondió Richard haciendo que las venas de su garganta se hicieran visibles.
- Eso no es asunto tuyo si lo quiero ser...
- Prima no te pierdes de nada, lo tiene chiquito. – Dije con toda naturalidad haciendo un gesto uniendo el dedo pulgar con el índice.
- ¿Y tú cómo sabes eso? – Rugió Richard más alterado que antes.
- Eso no es asunto tuyo...
- Tampoco el de mi hermana que ese sujeto lo tenga...ya sabes...
- Es mi ex. Me voy a la cama ¿Vienes Susan? – Dije ya aburrida y cansada.
Los hermanos se quedaron plantados donde habían estado discutiendo, subí las escaleras dejándolos atrás sumergidos en su sorpresa por la veracidad de mis palabras, pasé la habitación de Anna, luego la mía, de donde se podían escuchar algunos gemidos, y llegué a la habitación de mis padres, me despojé de mi vestimenta hasta quedar en ropa interior y me desplomé en la cama para quedar dormida al instante.
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El Diario de las Sombras (PRONTO EN FÍSICO)
Mistério / SuspenseEl Diario de las Sombras es una historia de misterio y suspenso con algunas gotas de romance ambientada en la actualidad. Los eventos se desarrollan en una ciudad inventada ubicada en Latinoamérica llamada Delta Río. Después de un desmayo al ver un...