[EN EDICIÓN] Contigo o Sin Ti: MyungJin

Capítulo 2

Ambos se miraron fijamente por un largo rato. Hasta que Sanha caminó hasta quedar en medio ambos.

—Jun-hyung él es Park Jinwoo —dijo señalando a la persona a su derecha y luego señaló a su izquierda—. Jinwoo-hyung él es Kim Myungjun, mi compañero de departamento.

Ambos se inclinaron ligeramente. Jun estaba por completo avergonzado e impactado, claro que reconocía quién era la persona frente a él. Nunca pensó que ese famoso Jinwoo del que Sanha tanto hablaba iba a ser su Jinwoo.

Además, se veía muy bien con ese traje.

Por otro lado Jinwoo por fin pudo reencontrarse con el chico del cual no había dejado de pensar. En su rostro apareció una pequeña sonrisa.

—Un gusto. —dijeron al unísono.

—¿Me das un momento? —dijo Jun. Sin esperar una respuesta tomó de la mano a Sanha y caminó hacia su habitación. Cerró la puerta con fuerza pero no se escuchó aquel sonido gracias al bullicio que había afuera—. ¿Por qué está acá?

Sanha estaba de espaldas a él, se volteó con una sonrisa que le causó escalofríos. Jun se mantuvo apoyado contra la puerta y desde ahí pudo ver cómo aquel omega empezaba a escarbar en su armario.

—¡Este es perfecto! —exclamó dejando ver una camisa y un pantalón de vestir. Ese era un conjunto demasiado formal pero provocador a la vez.

—¡Sanha!

—Hyung —colocó con cuidado sobre la cama el conjunto de ropa y volvió a quedar frente a Jun—. ¿Sabe que esta es una oportunidad que no debe dejar pasar? ¡Su ídolo esta aquí!

—Sanha...

—Mientras busco un par de zapatos decentes, debes guardar todos esos carteles con su rostro ¿se imagina si él los ve?

Jun asintió y con un sonrojo en sus mejillas empezó a descolgar todas esas propagandas donde Park Jinwoo aparecía. Aunque no sabía si él iba a estar en su habitación, era mejor prevenir que lamentar.

—¡Ya está! —cuando Sanha vio que Jun había terminado de ordenar, le guio hasta un rincón—. Cambiese, no puede estar en esas fachas frente a él.

Jun hizo lo que le dijo y se empezó a desvestir. Sanha estaba de espaldas a él y se mantuvo observando la puerta, aunque antes había dicho que no había de qué preocuparse si ambos eran omegas. Aún así, Jun insistió.

Cuando Jun terminó de vestirse caminó hacia el espejo de su armario. Sin duda, se veía mejor que cuando había llegado de la universidad.

—Hyung, si hoy no empiezan a salir yo me voy a colgar como piñata —dijo acercándose y aplaudiendo. Estaba orgulloso del conjunto de ropa que había armado.

—Gracias, Sanha —sonrió.

—¡Pero! —alzó la voz, dejando a Jun confundido. Y por la sonrisa que tenía ya sabía que estaba a punto de hacer algo que probablemente no le iba a gustar—. Solo seran dos.

Sanha empezó a abrir la camisa, los primeros dos botones habían sido retirados dejando que se exponga parte de la clavícula de Jun.

—¿Qué haces?

—¡Ahora sí! —con ambas manos sujetó el rostro de Jun—. Vas a ir y vas a empezar a coquetear. No me decepciones, hyung.

Obviamente Sanha no podía pasar esta oportunidad de hacer que su amigo y compañero de cuarto se divirtiera, aunque sea esta noche, así que le agarró de la mano y salieron de la habitación. Para suerte de ambos, Jinwoo estaba conversando con Bin.