Capítulo 3

94 14 1
                                    

Jinwoo estaba en su oficina con el ceño fruncido, parecía querer romper el teclado de su computadora cada vez que escribía algo ahí. Estaba de muy mal humor. Recostó su espalda en su asiento y se llevó una mano a su frente.

Sus ojos estaban cerrados y comenzó a recordar.

Cuando despertó en la madrugada, el alcohol ya se había ido de su sistema, por lo que empezó a ver a su alrededor tratando de descubrir en qué lugar estaba. Al posar su mirada hacia abajo notó a una persona abrazandole. Un hombre.

Al tener un aroma familiar asomó más su rostro a aquella persona y por fin descubrió quien era su acompañante. Empezó a analizar la situación, acordándose vagamente de cómo llegaron hasta acá.

Volvió los ojos hacia Jun y de repente él estaba mirándole fijamente haciendo que dé un pequeño brinco en la cama. Le había asustado.

—Hola —susurró con una pequeña sonrisa, era probable que él aún siga dormido.

—Calor.

No comprendió lo que dijo hasta que vio cómo se sentaba en la cama y empezaba a quitarse la ropa delante de él. Detuvo sus manos, era inapropiado que haga eso y probablemente se arrepienta más tarde. Suspiró. No quería que él se arrepienta de esto, era menos doloroso que no le tome importancia a que se arrepienta.

—Hace calor... solo la camisa —se quejó

Hizo caso y le soltó. Mala idea. Si Jun ya se veía sexi con esa camisa, ahora lucía el doble al quitar cada botón de ella. Jun empezó a sacarse la camisa y de paso los pantalones también. Estaba sentado frente a él mirando al techo. Esto era realmente un poco... estimulante.

—Jun...

Al escuchar su nombre de inmediato volteó a verlo. Sonrió vagamente y se volvió a acostar acurrucado a su pecho, sintiendo el calor de ambos.

—Jinwoo...

Empezó a dar pequeños besos en su cuello, mientras que con sus dedos dibujaba círculos imaginarios sobre la camisa de Jinwoo, haciendo que este sienta pequeñas cosquillas en ese lugar. Nunca había imaginado estar en una relación después de tanto tiempo, pero esto no era tan malo después de todo.

Poco a poco los besos subieron a su oreja, mejilla y parte de su mentón, a la vez que sus manos empezaban a desabotonar su camisa. Jinwoo sentía pequeños escalofríos recorrer su piel.

—Jun... No. —susurró.

Él volteó a verlo con una mirada triste que hizo querer cambiar su "no" por un "sí". De lo cual se arrepintió al ver la sonrisa de victoria en el rostro contrario.

Logró desabotonar su camisa.

Después de eso simplemente no pasó nada. Jun quedó dormido en su pecho mientras que él jugaba con su cabello castaño. Ya no podía dormir, no con el problema que le provocó Jun.

Se quedó observandole hasta que amaneció. Sus ojos empezaron a moverse dando a entender que ya iba a despertar.

Cómo quisiera volver a esta mañana. Donde parecía no haber preocupaciones y lo único que podía estar haciendo era ver a esa persona que ahora no sale de su cabeza. Bueno, desde la primera vez que lo vio no ha desaparecido de sus pensamientos.

—¡Hyung! —Bin entró a la oficina y cerró la puerta tras de sí.

—Bin, buenos días.

—¿Dormiste bien? —le dió una mirada cómplice.

—No olvides que yo no tengo lagunas mentales después de una borrachera, Bin —Bin le miró nervioso—, pero te agradezco que me hayas dejado olvidado.

[EN EDICIÓN] Contigo o Sin Ti: MyungJin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora