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Cuando los señores Kim volvieron de la clínica por la tarde se encontraron a los chicos jugando Playstation en el living, bueno Jungkook solo miraba desde un rincón del sillón, pero se veía entretenido con las locuras de los otros dos.

Por suerte Seung ya se encontraba casi recuperado y le darían el alta el lunes por la mañana así que sería la última noche que el pelinegro pasaría sin su papá. Cuando Na-Ra se lo comunicó Jungkook simplemente respondió con una leve reverencia de agradecimiento.

Luego de haberlo charlado por un rato los Kim decidieron que sería mejor para el pelinegro volver a quedarse a dormir con ellos, para prevenir otro ataque como el de la noche anterior, así que al comentarles la idea rápidamente se pusieron a hacer planes para mirar una película después de cenar.

Jimin no podía estar más contento, iba a tener a Jungkook cerca suyo por un poco más de tiempo, sentía que ese fin de semana los había ayudado a conocerse mejor.

(...)

Habían disfrutado mucho el día juntos y si fuera por el rubio seguirían toda la noche viendo películas pero lamentablemente debían dormir temprano ya que el día siguiente todos tenían responsabilidades que cumplir, trabajo y estudios, así que a eso de las once de la noche tuvo que despedirse del pelinegro.

— si llegas a tener una pesadilla o no podés dormir por algo podés ir a buscarme ¿si? — dijo Jimin preocupado antes de subir a la habitación de Tae.

A Jungkook le habían improvisado una cama en el sillón, y ya estaba allí acomodado. El rubio se había encargado personalmente de abrigarlo, dejarle un vaso con agua y el peluche que sabía era importante para él.

Quizás estaba tratandolo como un niño pero el pelinegro no parecía incómodo con eso, al contrario le había sonreído contento todo el tiempo.

No le había vuelto a hablar desde la tarde pero a Jimin eso no le importó, mientras estuviera felíz.

Habían compartido mucho durante esos dos días y no podía pedir más. Esperaba que los días siguientes todo continuara fluyendo de la misma manera.

Según habían comentado en la cena los papás de Tae, al señor Jeon le darían el alta por la mañana así que seguramente cuando volviera de la Universidad el pelinegro ya no estaría allí, sino en su casa junto a su padre.

Iba a extrañar tenerlo cerca pero estaba contento de que pudiera volver a su casa y a su zona de confort.

Esa noche Jimin durmió recordando todo lo vivido, las pequeñas cosas que Jungkook le contó y cada una de las sonrisas hermosas que le había regalado.

Su corazón latía acelerado cada vez que pensaba en todo eso y unas cosquillas se arremolinaban en su estómago.

Jimin culpó a la cena, había comido mucho y seguramente todas esas sensaciones era su cuerpo diciéndole que debía cuidarse más.

Sí, seguro era eso, no era por que su crush por Jungkook estuviera creciendo demasiado rápido... Claro que no.

(...)

Cuando el rubio bajó a desayunar el lunes muy temprano esperó ilusionado encontrarse al pelinegro pero no fue así.

Según le comentó el papá de Taehyung, la señora Na-Ra y Jungkook se habían ido hacía rato a ordenar la casa vecina para recibir a Seung.

Jimin desayunó y se fue a trabajar sus horas en la cafetería, luego fue a la universidad, el día se le estaba haciendo larguísimo ya que en todo lo que podía pensar era en regresar para ver al vecino y asegurarse de que estuviera bien.

Fix you ✨Completa✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora