Rewinding...

Deja vu

Parecíamos dos ladrones en mitad de la noche, el antiguo Grey estaría alarmada en este momento poniendo en práctica sus reglas para evitar a los matones de la noche. Pero yo ya no era así, nunca más volvería a ser así. Cruce por la calle de Sweet Foliage, ya estábamos cerca de la tienda, el viaje había sido más que satisfactorio.
Pare antes de llegar al lugar.

—¿Estás preparado?— pregunte mirando a Roy.

—Si.

—Ok, las luces del local siguen encendidas, es probable que el hippie siga ahí—abrí la tapa del termo y sumergí la hoja de la navaja en el líquido, para después sacarla y cerrar el termo— vamos.

Oculte la navaja y entre al local.

—Buenas noches.

El hippie se percató de mi presencia, agudizo su vista, parecía no estarme viendo bien. La puerta se cerró, Roy había entrado. El hippie se alarmo y saco la pistola que guardaba en su mostrador apuntándola hacia nosotros.

—Son ellos Marcus.

Detrás de un estante lleno de incienso salió Marcus, también apunto su pistola hacia nosotros.

—Al parecer las presas vinieron al cazador, ¿No lo crees Vicent?

—Acabemos con esto, matar adolecentes no es algo que me guste hacer—respondió el hippie a Marcus con una voz temblorosa.

En esta situación estábamos en desventaja, era hora de mi as bajo la manga.

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Volví al momento en el que ya tenía la navaja empapada de veneno.

—Roy, ¿Qué tan buena puntería tienes?

—Digamos que medianamente buena, ¿Por qué?

—Si entramos el hippie nos apuntara con su pistola y Marcus saldrá detrás del estante de incienso de la derecha, necesito que lances tu cuchillo al hippie y lo desarmes, yo me encargare de Marcus.

—Oye, yo quería a Marcus.

—Lanzaría el cuchillo yo, pero tu cuchillo de carnicería tiene más impacto, a parte, tengo terrible puntería.

—Bueno, está bien, hare lo que pueda.

—No dudes o moriremos.

Asintió con la cabeza. Le hice una señal y me plante en frente de la puerta abriéndola. Sin perder el tiempo corrí con todas mis fuerzas hacia el estante de incienso derribándolo, se escuchó un quejido que supuse era Marcus. Vi de reojo al hippie apuntándome para ver después como el cuchillo de carnicería se clavaba en parte de su cara haciéndolo chocar contra la pared del impacto.

Me levante desplazándome hacia la parte trasera del estante donde estaba Marcus que apenas había logrado apoyar su brazo en el suelo. No lo pensé dos veces y clave el cuchillo en su espalda, lanzo un fuerte grito, me aparte sacando la navaja antes de que pudiera agarrarme. Apretó el arma e iba a apuntarla en mi dirección, pero un estallido seguido de un leve impacto metálico hicieron que el arma de Marcus chocara contra la pared, sus dedos estaban doblados de una manera bastante desagradable.

—¿Te gusto eso?

Voltee al mostrador y vi a Roy parado encima apuntando el arma hacia Marcus, de esta salía una pequeña nube de humo, Roy me había salvado. Parecía agitado e intentaba mostrar felicidad con una extraña mueca en su cara.

—¡Malditos niños!— intento levantarse, se tambaleo al enderezarse totalmente.

—Acepta tu derrota Marcus, morirás aquí y ahora, te inyecte una dosis mortal del veneno que use aquella vez en mi casa, si intentas algo Roy te disparara— me tranquilice, me peine un poco el cabello con las manos, era algo complicado con los guantes puestos —perdiste.