The Ayers (Antes De Que Te Destruya 1)

26: En busca de la felicidad

Ellen
-Al parecer me encontraba en una especie de laboratorios abandonados. Paredes blancas oscurecidas, luces parpadeántes que con mi paso se apagaban, no permití que el miedo se apoderase de mí. Iba a salir de allí fuera como fuera. Bajé las escaleras rápidamente hasta llegar a la planta final. Encontré fotos y más fotos con nuestras caras colgadas y entrelazadas con un hilo rojo. No me paré a observarlo detenidamente. Necesitaba huir de allí lo antes posible. Recorrí la mayor parte del edificio hasta que encontré una puerta. Esta daba a la parte montañosa de Seattle. Por suerte, encontré a una mujer que me llevó hasta aquí. De camino, llamé a la policía.  Ahora mismo, van para allá. Por suerte, salí con vida. Tuve la opción de matarlos a todos, pero ellos eran más y iban mejor armados. Así que simplemente me marché sin ver la cara del jefe de aquella especie de "organización" que quería acabar con nosotros-
Anna terminó de hablar, nos dejó consternados. Todo eso que ella había vivido, todas aquellas cosas que vivió ahí dentro. No merecía eso, ella era la única persona junto a Anne de la familia que nunca había hecho ni dicho nada malo. Bueno, al parecer poco a poco estaba comenzando a perdonar y olvidar, todo comenzaba a recobrar forma. Y toda mi sed de venganza iba disminuyendo.
Ahora, solo quedaban un par de cosas por saber. Quien era el jefe de la organización y quien asesinó a Amber. Pero mientras tanto, todo continuó igual.
Si es cierto, empezaba a querer a Luke de verdad pero él dañó a mi hermanastra de alguna manera.
¿Que relación tenía Amber con los Ayers? Bueno antes de que lo descubriera mucha, más de la que creéis.
Bueno aunque antes de perdonar completamente, me quedaba una cosa por hacer. Escuchar las grabaciones del micrófono que conecté en el despacho de Dewey.
-Ahora, me voy a dormir, necesito descansar- Dijo Anna levantándose de su asiento. Ella actuó normal pero a los demás nos dejó petrificados.
De pronto, Luke se levantó y le dio un fuerte abrazo.
-Te quiero hermana- Suspiró- Jamás volverán a hacerte daño . Una vez se separaron, ella se marchó a su habitación .
Los demás se marcharon, y solamente quedamos Luke y yo en la sala.
Él, se acercó hacia mi acariciando mi mano.
-¿Quieres quedarte a dormir?- Dijo dando un mini puchero. Sabía que estaba mal y que quería compañía esa noche.
-¿Quieres que me quedé? Así no podrás descansar- Dije abrazandole.
-No podré dormir si no duermes junto a mi-
Al final acepté y el lo entendio cuando le dí un beso corto en los labios.
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Noticia de última hora, la joven Anna Ayers, ha aparecido.

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Me encontraba en el baño, llevaba una camiseta de él que me venía por las rodillas y unos bóxer blancos de Pull and Bear que él me había prestado.
Me miraba al espejo, y nunca imaginaría que dos años atrás hubiera acabado así. Junto al que era uno de mis peores enemigos.
Salí del baño y me acosté en la cama.
Luke, aún no había llegado.
Su habitación, me parecía realmente inmensa. Sencilla pero solo esa duplicaba mi casa en Francia.
-Hola- Dijo entrando. Madre de dios. Se encontraba sin camiseta y con unos pantalones blancos de pijama que colgaban de su cintura. Le quedaban tan bien. Mi subconsciente realmente estaba a full de malpensamientos.
-Hola- Dije yo. El silencio abundó en la sala durante unos instantes por lo que decidí hablar-¿Quien es esa mujer que estaba hoy aquí?-
-Mi tía-
-¿Tú tía?-
-Sí, la encontré en la isla a la que me enviaste cuando me metiste en un barco de carga y escondiste  ahí cuando estaba un poco bebido-
-¿Un poco? Sí no sabías ni lo que decías. Las setas en comparación a eso, serían un garbanzo.
Él, soltó una sonrisa burlona para después acercarse y subirse encima de la cama justo encima de mi.
¿Iba a pasar lo que creía que iba a pasar? ¿Iba a hacer lo que creía que iba a hacer?
Pues no, simplemente me besó y se colocó a un lado de la cama.
Mi subconsciente gritaba: ¡Se está enamorando de mí!- Mientras hacía de animador.
Entonces apagó la luz y yo me recosté sobre su pecho para luego rodear su cintura con mis brazos.
Instantes después ambos quedamos durmiendo.
                   ***
Ruidos me despertaron. ¿De que se trataba?
Me levanté de la cama para hacer todo lo posible por no despertar a Luke. Caminé por los pasillos siguiendo aquella voz a esas altas horas de la madrugada.
¿Se trataba de Rachel?
-Todo está controlado. Ya se que sabes lo que oculta, y yo realmente sé por que contactaste conmigo. Por eso he vuelto a Seattle. Me encargaré de matarla, eso está hecho.
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Nota del autor: ¡Pero bueno! La que se va a liar no es normal.
Nos vemos en la siguiente actualización...