Circus (+18) I COMPLETA I

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Tanto Austin como yo nos habíamos quedado sin aire. Elián soltó aquella bomba tan repentinamente que detonó demasiado fuerte, hasta el punto de dejarnos petrificados. Tuve que repetir sus palabras en mi cabeza varias veces para comprenderlas y darles por fin un significado. Pero una vez formado, no quería creerlo. Cuando pensaba que todo por fin había acabado, el pequeño nos viene con esto.

-¿Quién de los dos le cortó el cuello a Valerie?- le había preguntado yo a Penny.

-Ninguno- me contestó ella.

Por supuesto que no le había creído. La respuesta llegó por parte de una loca que seguía órdenes de otro loco. Yo había llegado a sacar mis propias conclusiones, las que creía más obvias, y simplemente di por hecho que había sido Andy el responsable de tomar el bisturí para luego cortarle el cuello a Valerie. Después de todo, se volvió loco por el constante acoso que recibía de ella y los malos recuerdos que le dejó. La furia y su sed de venganza albergaron su mente por completo hasta crear este monstruo que nos hizo pasar por todo esto. Por eso, no me hubiese sorprendido que él haya sido quien le quitara la vida a la persona que más odiaba en el mundo.

¿Pero resulta que no es así? ¿Y que, en realidad, fue este pequeño niño de rostro angelical?

-¿Qué has dicho, Elián?- le preguntó entonces su hermano mayor, luego de un largo silencio.

Él se incorporó, limpiando las lágrimas que descendían por su rostro, y con total pena y arrepentimiento en el brillo de sus ojos, repitió lo que había dicho.

-Yo le corté el cuello a Valerie.

Austin me miró sin saber qué decir, o hacer. Está impactado, o tal vez sorprendido. Seguramente no quiere creérselo. La idea de que dos miembros de la familia tuvieran que ver con el asesinato de Valerie, probablemente fue un golpe duro en su frágil corazón. Por eso, cuando comprendí que él no podía tomar las riendas del asunto, lo hice yo.

-Elián, escúchame- puse sus mejillas sobre mis manos- Si Andy en algún momento te obligó a decir algo como eso, tienes que saber que él ya no está. No hay necesidad de...- cuando quise continuar, el pequeño me interrumpió

-No. Solo estoy diciendo la verdad- todo en él tembló- Yo maté a mi hermana.

Cuando terminó de pronunciar la última palabra, la estructura de su cuerpo se descompuso por completo hasta caer sobre el sofá. Elián comenzó a llorar aún más fuerte, llevándose las manos al rostro, como si no quisiera que lo viéramos. Se hizo un ovillo sobre sí mismo y se desgarró la garganta gritando que quería morir.

Aquello fue muy doloroso para su hermano mayor, pues ya había pasado por mucho con su familia y lo último que quería era más muerte. Se aseguró de abrazarlo y de hablarle al oído con delicadeza, intentando tranquilizarlo. Pero Elián seguía con los mismo. Escucharlo me rompía el corazón en mil pedazos pero me sentía una intrusa si me metia. Por eso, les permití darse un momento, al menos hasta que Elián se recuperara y pudiera hablarnos con sinceridad y explicara lo que nos había dicho, porque había sido algo que podía llevar las cosas a cagarse... otra vez.

Es un niño, joder, tal vez ni siquiera sabe lo que dice. ¿Y si se refiere a que se siente culpable por su muerte? Joder, pero mencionó y especificó el corte en el cuello. Fue una simple frase que lo desencadenó todo.

-Yo también tengo que subir a disculparme...- lo escuché susurrar en el pecho de Austin- No merezco vivir...

-No digas esas cosas, te lo suplico- Austin besó su cabellera roja- No pienso perderte a ti también. Solo dime lo que pasó, Elián- continuó acariciando su espalda, y cuando siguió sin obtener resultados, me miró- Aubrey...