Natalia y yo nos encontrábamos dentro del coche. Apenas me estaba familiarizando con los controles y botones de la camioneta, cuando Natalia me pregunta.
—¿Dónde puedo conectar mi celular para poner música?
—¿Te parece que soy una persona que sabe en estos momentos? — le contesté mientras le picaba a un montón de botones a la vez—. A ver creo que tienen que ser por aquí...
—Sí, es por ahí déjame sincronizo mi celular con la camioneta.
Mientras yo acomodaba mi asiento, los espejos, el volante, mi hermana estaba encargándose de la tarea más difícil. La música que se va a escuchar por primera vez en mi camioneta.
La música siempre ha sido parte de mí, de nosotras. Cuando éramos más pequeñas teníamos un tonto juego en el que nos enseñábamos nuevas canciones por turnos. Primero llegaba Natalia y me decía que acababa de escuchar una canción que tenía que escuchar y yo le contestaba con la misma frase.
Nuestros gustos musicales son muy parecidos, muchas veces nos conectábamos con la música.
La música es un tipo de curita para el alma.
La música me entiende cuando nadie más lo hace.
La música me sostiene cuando siento que me voy a caer en pedazos.
Así que decidir que canción iba a comenzar a sonar en mi camioneta, era una decisión importante.
—El otro día estaba escuchando a Ed Sheeran y me encantó esta canción. Pero me desespera que siempre me equivoco cuando la quiero cantar—me dijo Natalia mientras pasaba sus dedos por todas las canciones que tenía en su celular.
—Ed Sheeran, siempre va a ser el amor de mi vida.
Puse el coche en marcha mientras mi hermana escogía la canción que quería ponerme de él.
—Creo que la canción se desarrolla en un pueblo de Irlanda—me decía mientras comenzaban a tocar los primeros acordes de una canción que nunca había escuchado—. Y se enamora de un inglés, pero ya sabes los irlandeses y los ingleses mejor a sus casas. Siempre que los juntas terminan peleándose por cosas sin sentido.
No sabía mucho de Irlanda, solamente que su capital es Dublín, hablan inglés y hay pelirrojos en todos lados. Y de cuestiones de historia solamente que los irlandeses se independizaron de Reino Unido hace muchos años, pero sigue habiendo una pequeña parte de Irlanda que le sigue perteneciendo a la Corona Británica.
Me comencé a concentrar en la canción mientras escuchaba como Natalia la tarareaba. Y de fondo solamente se escuchaba la canción de Galway Girl de Ed Sheeran.
—...you know, she played the fiddle in an Irish band but she fell in love with an English man kissed her on the neck and then I took her by the hand said, "Baby, I just want to dance" with my pretty little Galway Girl... you're my pretty little Galway Girl.
La canción estaba muy pegadiza, al poco rato que iba sonando la canción le agarré el ritmo y comencé a tararearla junto con Natalia, mientras íbamos manejando por las calles de Guadalajara.
—Está muy buena, ¿a poco no? No puedo dejar de escucharla desde hace unos días.
—Tengo que admitir que está pegadiza, pero me confundo mucho con la letra de la canción. Sobre todo, al principio.
—Es que dice el nombre de una calle y luego de no sé cuántas personas.
—¿Qué es Galway? ¿Es un bar? —le pregunté mientras me concentraba en el tráfico.
—Me puse a investigar y resulta que es una ciudad que parece pueblo en Irlanda.
—¿Un pueblo?
—Sí, a mí también se me hizo raro que quisiera escribir sobre un pueblo olvidado de Irlanda y no de la capital.
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Hasta donde suene mi voz
RomanceSi alguien te dijera que tu vida está por cambiar, pero no por el buen sentido ¿cómo te sentirías? Sofía estaba a punto de dar ese gran salto hacia la adultez. Ya estaba pensando si se iba a ir a Australia o a Canadá... pero ¿qué pasa cuando la vida...
