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capitulo trigésimo sexto

capitulo trigésimo sexto

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Hwan Hyesun.

—Es aquí.

Mi vista se pasea a través de las ventanas del auto de Dongyul. Los írises de mis ojos divisan una casa que no parece estar habitada. Casi no me creo el que alguien no viva allí, porque está muy bien cuidada. Incluso el cesped está cortado. Tal parece que la expresión de mi rostro es notada por el castaño, por lo tanto, estaciona el auto unas dos cuadras después.

—Yoongi cuida mucho de esta casa. No sé exactamente la razón, pero siempre viene acá en su tiempo libre—comenta, recostandose en el asiento del piloto tras soltar un suspiro—. De todos los lugares es donde él eligiría ir en una situación como esta... después de todo...

—Conoció a Jungkook allí—termino por él, observando el espejo retrovisor.

La casa está transitada en un barrio de clase media-baja. Se ve muy sencillo, y no diviso gente caminando por las aceras, lo que le da un toque vacío y silencioso.

Dongyul se ve sumido en sus pensamientos. Me pregunto que cosas estarán pasando por su mente. Tampoco es dificil adivinar que se trata de su amigo, seguramente se esté maquinando algúna razón por la que él haya decidido perderse en esa casa, y el motivo por el cual ambos llegamos a la conclución de que Yoongi se encuentra allí, es porque vimos su auto mal estacionado en la entrada de la misma.

Cuando reconocí el vehiculo hace unos minutos fué como si Dios me haya dado el privilegio de respirar otra vez. En todo el camino me aterraba pensar en la posibilidad de que él no estuviera por aquí, lo que me conllevaba a maquinar en qué haría si no lo encontraba. Este lugar fué mi unica esperanza la primera vez que lo tomé en cuenta. Descartando los sitios antes mencionados, como su apartamento.

—Deberías ir, sinceramente me asusta ver su preciado auto tan cerca de la entrada—finge un escalofrío—. La ultima vez que quise tocarlo casi me quedo sin un brazo.

Chisto, sonriendole. No me imagino a Yoongi discutiendo por un vehiculo, pero eso es lo que me gusta de él; que sea tan impredecible y haga cosas que crees que no hará. Decido tomar la palabra de Dongyul para ir a verlo. No puedo seguir esperando más, y tengo los nervios a flor de piel. 

Abro la puerta de copiloto. Es de noche aún, así que la ventizca me cala hasta la punta de lo huesos por culpa de la desnudez en mis muslos, pero no me importa. De todas maneras pongo un pié en el suelo, y antes de que pudiera enderezarme por completo, la mano de Dongyul me toma de la muñeca. Casi sorprendiendome. Me giro para observarlo, dandome cuenta de que su entrecejo está levemente fruncido.

—Gracias por quererle, Minsuk, creo que es un jodido afortunado al tenerte.

Ante sus palabras, mi mirada cae hacia su mano envuelta en mí. Sonrío levemente, y es cuando sus dedos me dejan ir para enderezarse en su asiento.

Partner. » m.yoongi; BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora