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AUTOR: crying_trash
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Jungkook parpadeó lentamente, gimiendo cuando los rayos del sol le dieron en la cara, antes de tomar la manta y arrojarla sobre él. Pero inmediatamente después sintió un tirón, la manta lo destapó, la luz casi lo cegó. Ni siquiera lo pensó dos veces antes de tirarlo hacia atrás, un grito y una patada en su costado siguieron poco después.
"¿Qué dem-?" Empezó, pero una mano sobre su boca lo detuvo.
''Demasiado ruidoso.''
Giró la cabeza hacia la voz, el cabello despeinado que sobresalía de debajo de las sábanas y le picaba la nariz. Jungkook bajó la manta, entrecerrando los ojos, ojos cansados y una boca fruncida encontrándose con él, su pecho apretándose de la misma manera dulce y dolorosa que la primera vez que lo vio.
"Demasiado brillante." Agregó el otro, tratando de enterrar su rostro entre las almohadas. Jungkook se movió más cerca, ansioso por sentir mejor la calidez que irradiaba Seokjin y solo queriendo estar aún más cerca del amor de su vida. Empezó a pasar una mano entre su cabello, deteniéndose para masajear su cuello. Como esperaba, el hombre se apoyó en su mano, exigiendo más en silencio.
"Creo que deberíamos levantarnos". Dijo pasando una pierna sobre la otra, medio atrapándolo debajo de su propio cuerpo. Seokjin tarareaba mientras movía la cabeza, terminando por morder su mandíbula, haciéndole cosquillas, y no dudó en acercarlo aún más y darle un beso en la frente. No pudo contener la risita que escapó de sus labios cuando la cara del otro se levantó, con los ojos cerrados y los labios fruncidos, esperando un beso.
Y no pudo menos que cumplir.
Pero entonces algo en él se rompió, el sabor de Seokjin, flexible y feliz en sus brazos encendiendo el calor eterno que latía dentro de él, para él, y comenzó a besar sus mejillas, nariz y párpados, con cada beso, el rostro de Seokjin se ponía más rojo. pero resplandeciendo de alegría.
Apoyó la cabeza en su hombro, comenzando a mordisquear la piel debajo de sus labios, tersa y suave debajo de su lengua. Jungkook sintió el momento en que el otro se contrajo, una mano se apretó alrededor de su brazo por lo que se detuvo, sus labios descansando contra el cuello. La mano agarró la suya aún más fuerte mientras un pie se enganchaba alrededor de su tobillo y tiraba de él más cerca. Una sonrisa floreció en su rostro ante la acción, por lo que a petición del hombre, se acercó aún más, tanto que estaban tocando todo el cuerpo, todo su ser envuelto en puro placer.
Acariciando lentamente el hombro de su amante con la boca, rodeó su cintura con el brazo, el repentino e inexplicable deseo de fusionar sus cuerpos, llevarlo dentro de él para que siempre pudieran estar juntos, para protegerlo y cuidarlo siempre, casi lo asusta. La gama de emociones que este hombre podía hacerle sentir era asombrosa. Habría adivinado que un día, un solo hombre podría llegar a ser tan importante para él. Podría convertirse en todo su mundo.
Se despertó de sus cavilaciones cuando sintió un golpecito en la nariz, inmediatamente después de ser reemplazado por un beso, el rostro de Seokjin lo miraba con una sonrisa apenas visible, los ojos soñolientos casi cerrados por completo.
Jungkook pasó un pulgar debajo de las hermosas piscinas de color marrón oscuro, suspirando al ver la piel hinchada y roja a su alrededor. Realmente deseaba dejarlo dormir un poco más, pero mirando el reloj e ignorando el desorden alrededor de su habitación, ropa, bolsas de comida para llevar e incluso algo de confeti por todo el piso, notó que era casi la tarde.
"Deberíamos levantarnos", dijo de nuevo, pero sin convicción, ya que solo quería permanecer en sus brazos todo el tiempo que pudiera.
'' Mh-mh. Deberíamos." Fue la respuesta cuando Seokjin lo abrazó, escondiendo su rostro en su pecho y cerrando los ojos. Besó la parte superior de su cabeza, en respuesta recibió uno en el pecho, al lado de su corazón, la maldita cosa se saltó un latido por la acción.