Los vehículos policiales nos persiguen y puedo ver cómo la gente corre en la calle por la locura que se ha desatado. No solo hay policías, también ambulancias transportando muchas personas heridas en camilla debido al tiroteo.
−Afírmate, no te desconcentres, en cualquier momento podría girar bruscamente o detenerme de golpe. −me informa Zev conduciendo a mil por hora y siento que algo verdaderamente malo ocurrirá en cualquier instante.
Me aferro al cinturón de seguridad con más fuerza, sintiéndome incapaz de siquiera pestañear, mi respiración se siente en hiatus y solo sé que tengo el corazón latiendo tan fuerte que prácticamente lo puedo percibir en la garganta.
Aun así, miro para atrás, hacia la ventana trasera y veo que ambos policías aun nos siguen de cerca.
−Todavía no los perdemos. −digo y pego un grito cuando vuelvo mi mirada al frente y veo que cruzamos un semáforo en rojo provocando que algunos autos colisionen seguido de mucho ruido de bocinas y gritos de conductores enrabiados.
Entrecierro mis ojos intentando ver a través del desastre si es que los policías aun vienen tras nosotros y me sorprendo al ver que repentinamente un vehículo policial sale desde una calle lateral y otro aparece frente a nosotros, sale repentinamente desde tras de un edificio provocando que Zev gire abruptamente hacia la izquierda para alejarse de él lo más rápido posible.
Mi cuerpo se azota bruscamente contra la puerta y mi cabeza se golpea contra la ventana.
−¡Dije que te afirmes! −me grita y me toco la frente dándome cuenta de que tengo un poco de sangre.
Repentinamente se escucha el sonido de tres sirenas policiales encenderse a todo volumen y cuando miro atrás veo tres vehículos policiales persiguiéndonos. Dos vienen tras nosotros, adelantando rápidamente a los demás autos que obstruyen su camino, acercándose a toda velocidad y el otro viene a un costado derecho de nosotros, en la calle paralela también acercándose velozmente.
−Maldición, ya están sacando sus armas. −dice Zev viendo por el espejo retrovisor y creo que me dará algo cuando veo a los policías tras nosotros apuntando a las ruedas de nuestro vehículo.
−Diablos, si nos disparan a las ruedas, a esta velocidad nos volcaremos horriblemente. −menciono asustada, no hay manera de que no pueda estarlo, esto es malo, esto es muy muy malo.
−Lo sé, necesitas afirmarte, ¿entiendes? −dice antes de que el sonido de las balas se sienta estallar justo tras mi espalda y Zev comience a mover el vehículo de un lado a otro con todas sus fuerzas para evitar que las balas nos alcancen.
Mi cuerpo se sacude a todas partes y vuelvo a oír los disparos dispersándose tras nosotros una y otra vez. El ruido es fuerte, se siente como un estallido justo tras mi espalda, por suerte Zachary parece tener el control del vehículo y de lo que está haciendo, aun así...
−¡Deténganse ahora o los disparos irán a sus cuerpos! −se oye gritar de pronto y cuando miro hacia atrás, con mucho cuidado, veo a uno de los policías hablando a través de un megáfono mientras los otros mantienen sus armas apuntando hacia nosotros. −Repito, ¡deténganse ahora o los siguientes disparos serán a sus cuerpos!
Yo miro a Zev preocupada. Si estos tipos comienzan a dispararnos a nosotros, esta vez ya no a las ruedas, entonces...¿Cómo podríamos protegernos de eso?
−Maldición...−gruñe Zev por lo bajo sin quitar sus ojos del camino y lo siento acelerar aún más.
Ni siquiera quiero ver a cuanta velocidad vamos, solo sé que si algo o alguien llega a cruzarse frente a nosotros hay dos opciones, o lo aplastamos o Zev se detiene y salimos eyectados a través del vidrio provocándonos múltiples heridas, e incluso podríamos morir. Mi cuerpo se siente como si dejara esta tierra, estoy entre la vida y la muerte.
ESTÁS LEYENDO
Monster
General FictionLa recién egresada de medicina, Amber Jones, se ve obligada a realizar un trasplante de corazón a un atractivo joven, hijo de uno de los mafiosos más buscado de la ciudad. Sin escapatoria, la joven doctora realiza la operación esperando que una vez...