Amelia.
La propuesta.
Matteo desde que se enteró de mi enfermedad se a empeñado en cuidarme, aún faltan dos días para la misión y según el quiere pasar el mayor tiempo posible conmigo, incluso hoy citó a mi papá y a su familia a una cena, al principio me negué pero fue demasiado insistente.
—Listo mi coronel, aquí tiene el informe que nos pidió.
—Muy bien, gracias sargento Muller, ¿El capitán?
—Viene enseguida, se quedó arreglando algo en sus tropas.
—Por cierto linda ¿cómo vas?— suspiro, odio hablar del tema.
—Lo estoy sobre llevando, estoy en tratamientos con el nutriólogo, incluso con un psiquiatra.
—¿Y tú?— respiro profundo— ¿Cómo te sientes?
—No lo sé, hay veces que pienso que no saldré de esta, es como si el miedo y la ansiedad me consumieran por completo, haciéndome creer que jamás saldré de este problema que yo misma me cause.
—Linda, eres una persona muy fuerte y puedes con esto y con más, esto solo es un tropiezo en tu camino, ya verás que todo irá mejor.
—Eso espero.
—Disculpe la tardanza coronel, estaba arreglando asuntos con mis tropas.
—No te preocupes, revisare el informe y les avisaré si necesito algo más, pueden retirarse.
Salgo de su oficina con Dereck tras mío, salgo del edificio para dirigirme al edificio de alcobas pero Dereck aún me sigue.
—Si sabes que aquí solo son alcobas de mujeres ¿verdad?
—Sí, pero hay algo de lo que tengo que hablar contigo.
—No pienso...
—Solo voy a decirte algo que pasó con tu padre, no te ilusiones- sujeta mi brazo y me lleva arrastras a mi alcoba.
—Ya sueltame— cierra la puerta— ¿Qué quieres?
—Deberías aprender a controlar tus emociones.
—¿De que hablas?
—¿Sabes por qué tu padre me citó en su casa?— niego, no estoy entendiendo nada— Cuando estabas dormida dijiste mi nombre— me río falsamente.
—No me hagas reír, jamás te mencionaria, aparte ¿por qué lo haría?
—Eso me pregunto yo ¿Por qué me mencionarias?
Tiene una estúpida sonrisa en el rostro que lo hace ver demasiado sexy.
—Tú padre a sospechado de nosotros.
—No se lo has dicho ¿verdad?
—Claro que no he dicho nada, no me apetece que todo el mundo sepa que tuve que ver contigo.
—¿Perdón?
—No te lo tomes a mal— ruedo mis ojos.
—Vete, tengo que alistarme.
—¿Por qué?
—No tengo que darte explicaciones, sal de aquí ahora.
—Okey, suerte en tu matrimonio— sale de la habitación y me quedo estática con lo que me a dicho.
¿Como que matrimonio? Matteo me propondrá... NO, mi sueño era casarme con Matteo pero algo a cambiado y ya no me siento preparada para esto. A ver Amelia piensa, Dereck solo está mintiendo, si Matteo hubiese querido pedirme matrimonio Dereck jamás se habría enterado, porque mi novio en esos temas es muy reservado, solo esta mintiendo para provocarme nervios y miedo, pero no lo va a conseguir.
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Cada quién elige su destino
AcciónAmelia Muller la hija del ministro es la encargada de llevar el caso de uno de los hijos del enemigo de su padre, sin imaginarse que en poco su vida cambiaría por completo, con la llegada de un capitán que la "ayudaría" con la tarea encargada de las...