Golpes y flores

Capítulo 5

Busan St. Mary's Hospital - Lunes 4 de mayo de 2009 - 09:32

— No es necesario que te quedes —susurró Jimin.

El y Jungkook estaban en la sala de espera para la primera ecografía de su embarazo.

— ¿Quieres que me vaya? —preguntó él intentando ocultar el dolor de su voz.

— No —contestó Jimin con firmeza—, pero no me gustaría que desatendieses tu trabajo por preocuparte por mí, estaré bien.

— No estoy dejando nada importante, lo prometo —intentó convencerlo Jungkook con una sonrisa. — ¿Me dejas entrar contigo?

— Sí —Jimin no pudo evitar sonreír.

Su amigo siempre estaba a su lado, se sentía seguro solo con su simple presencia. No sabía cómo pagarle todo lo que estaba haciendo por él, Jungkook y el resto de la familia Jeon. Seokjin era el asistente social e hizo que las pruebas de las agresiones de Minhyuk fueran más que contundentes, y Hoseok era un excelente abogado que estaba llevando su caso ante los tribunales. Recordar eso trajo a su memoria el juicio y se estremeció, esperaba que al menos Minhyuk pasara unos años en prisión, para que el pudiese salir adelante y poder defenderse a sí mismo y a su bebé.

— ¿En qué piensas? — lo distrajo Jungkook.

Él lo miró y sonrió mientras su corazón daba un brinco.... ¿qué significaba eso?

— En el juicio —suspiró— estoy deseando que esta pesadilla acabe.

— Lo hará pronto... verás como dentro de nada ya no te acordarás tanto de todo esto —intentó tranquilizarlo Jungkook.

— Señor Park, es su turno —los interrumpió una enfermera.

Ambos se pusieron en pie y entraron en la consulta del doctor. Jimin estaba tenso y Jungkook tomó su mano entre la suya para intentar tranquilizarlo, no era bueno para el bebé que se pusiese en ese estado.

— Hola Jungkook —saludó el doctor Bae a su colega.

— Hola Bae —le contestó él dándole la mano que le tendía.

— ¿Cómo tu por aquí... y tan bien acompañado? —preguntó el doctor sonriendo con picardía.

— Ya ves... —contestó simplemente encogiéndose de hombros.

El doctor Bae palmeó su hombro en un gesto de camaradería y Jungkook sonrió. El doctor comprobó los estudios que había pedido para Jimin y luego le pidió que se tumbase en la camilla. Jungkook se sentó a su lado y después de que el descubriese su vientre ya un poco abultado él le tomó la mano con fuerza insuflándole ánimos.

El doctor comenzó a mover el aparato por su vientre esparciendo el gel frío que lo hacía estremecer, pero el solo temía que las cosas hubiesen cambiado desde la última vez y su bebé no se encontrase bien. Se tranquilizó un poco cuando el doctor sonrió con complicidad mirando a Jungkook de reojo, eso tenía que ser una buena señal.

— Bueno... —suspiró el doctor— ¿quién te hizo la última ecografía? —preguntó con el ceño fruncido.

— Fui yo... —confesó Jungkook— ¿hay algún problema? Ya sabes que no soy un experto en estos temas.

— No es nada malo... —rio— pero sí una sorpresa.

Jungkook y Jimin se miraron confundidos y luego volvieron su mirada al doctor esperando una explicación por su parte.

— Todo está bien, estás embarazado de unas nueve semanas —dijo el doctor— pero, a este súper médico de aquí se le escapó un pequeño detalle.