Había llegado al castillo junto a mis amigos, Regulus, Severus, Lucius, Narcissa y Bellatrix.
Íbamos hacia las carrozas para poder llegar al castillo, mientras caminaba sentí como una mano fría había tomó la mía.
—¿Qué diablos te sucede Bella? —le preguntó indignado. Aborrezco las demostraciones de afecto, eso solo es para los estúpidos cursis
—Lo siento, creí que te gustaría —contestó Bellatrix.
—Pues sabés perfectamente que odio que hagas eso, hablaremos en el castillo—segui caminando más rápido dejando sola a Bellatrix pero no tanto como para no escuchar lo que decía Regulus.
—Te lo dije Bella con Tom no conseguirás nada –Regulus abrazo a Bellatrix –El te dijo que solo era sexo, lo olvidás?
—No, no se me olvida pero tal vez en algún momento cambie de opinión.
¿Cambiar yo de opinión? Si claro sigue soñando.
...
Habíamos llegado al castillo, fui a mi habitación, me coloque el uniforme y sali hacia al Gran Comedor para ver la ceremonia de Selección.
Cuando estuve apuntó de llegar al GC Bellatrix me acorralo contra la pared.
—¿Enserio irás a esa tonta ceremonia?— comenzó a acariciar mi pecho por encima de la camisa.
—Es obvio no –frunci el ceño
—Y si tu y yo vamos a tu habitación y hacemos lo que mejor sabemos hacer— sentí como su mano tocaba mi miembro por encima del pantalón.
—Hoy no tengo ganas de follar, ¿entiendes? —aleje su mano de mi miembro.
—Pues antes te gustaba follarme todo el tiempo — se mordió el labio inferior— ¿Qué te sucede Tom? –me miró extrañada.
—Cuándo quiera follar te busco o mejor consigo otra chica—reí cínicamente.
Cuando estuve por irme Bellatrix me tomó de la túnica y me jalo hacia ella, me beso desesperadamente seguí el beso hasta que ambos empezamos a perder el control y nos fuimos de ahí olvidando la ceremonia.
....
𝑻/𝒏 𝑩𝒆𝒏𝒏𝒆𝒕
Los chicos me habían dejado afuera del Gran comedor ya que tenía que esperar a que pasarán los chicos de primer año para su selección de casa, después iría yo.
Al cabo de 15 minutos escuché mi nombre, así que las dos grandes puertas se abrieron, camine hacia el sombrero seleccionador y me senté en un banco mientras una profesora de lentes con un sombrero de punta me colocaba el sombrero.
—Excelente, no había visto una bruja de tu clase en mucho tiempo –dijo el sombrero-
Yo solo me quedé callada
—¡Realmente difícil! ¡Llevas la sangre de grandes magos!
Al notar que el sombrero se tardaba demasiado empecé a sentirme nerviosa y ansiosa.
—Ya se donde te pondré.... ¡¡𝐆𝐑𝐈𝐅𝐅𝐘𝐍𝐃𝐎𝐑!!
Al escuchar esa palabra sentí un paz, los chicos de la mesa de Griffyndor aplaudían al igual que los profesores.
Me pare y fui en dirección a la mesa de Griffyndor, los chicos me felicitaron, en ese instante el director Dippet anunció que daba inicio el banquete.
Todos comían y charlaban, empecé a darle una vista a los profesores, todos se veían bastante agradables, en ese momento cruce miradas con un profesor, al verlo sentí una extraña sensación tanto que solté el vaso que contenía jugo de calabaza.
—¿Estás bien pequeña? –preguntó Sirius
—Amm si es que me distraje un momento, perdón –limpie la mesa.
—Que bueno que estarás con nosotros T/n –Remus sonrió amablemente.
—Estoy feliz de estar con ustedes. — Sentía la mirada de alguien desde la mesa dé profesores— ¿quien es ese profesor, el de traje gris?
Los chicos voltearon
—Es el profesor Dumbledore, enseña DCLAO, es el mejor –contestó James.
—Es cierto, siempre está dispuesto a ayudar, así que si un día tienes problemas puedes ir con el –dijo Lily.
—Pues se nota que es buena persona –dije sin quitarle la vista al profesor Dumbledore.
...
Al terminar el banquete nos dirigimos hacia nuestra sala común, mientras caminábamos hacia allá se nos acercó un chico bastante atractivo. Tenía el pelo negro y sus facciones eran muy apuestas.
—Hola hermanito, veo que sigues juntandote con Sangres sucias y traidores a la sangre –dijo mirando a los chicos-
—¡Oh por favor callate Reg! A mi nunca me ha importado eso y lo sabes –respondió Sirius.
—¡Pues debería importarte! –gritandole– Ellos no son como nosotros. —dijo con un tono de desagrado.
James estuvo a punto de golpear al hermano de Sirius cuando yo decidí interferir.
—¿Tu idiotez es enfermedad o es costumbre? – lo mire seriamente.
El chico sólo se quedó callado
—Vamos chicos, no perdamos tiempo con personas que carecen de cerebro –me aleje con los chicos.
Toma eso Black. Sinceramente me molestaba mucho que las personas fueran así.
