EN EL CAPÍTULO ANTERIOR
-Hoy por fin podré hacerle justicia a Pablo, sé que él desde dónde me observaba me valida, la venganza es dulce Jeanne, lamento que no puedas disfrutarla como yo...Apenas terminaba de hablar saqué la pistola de mi cartera. Pero no fui lo suficientemente rápida y Beatriz ya le había sacado el seguro a su arma, apuntando directo a Jeanne.
Todo pasa tan rápido que apenas puedo reaccionar. Jeanne intenta bajar mi arma para tomarla ella, pero todo se descontrola en ese instante y Beatriz no duda ni un segundo en disparar.
Escucho 3..4..y 5 disparos, me giro para observar a Jeanne y veo como sus ojos me observan con miedo, veo hacia abajo y la sangre comienza a salir de Jeanne, manchando sus pantalones...
En menos de diez segundos Beatriz le había dado 5 disparos Jeanne, quien cayó hacia atrás tambaleándose.
El silencio se hizo en la habitación.
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Veo a Jeanne caer de espaldas hacia el suelo. En unos segundos mi cuerpo y mi mente dejan de reaccionar al verle allí, tirada y perdiendo sangre por montones.
Beatriz aprovecha mi conmoción para salir por la puerta. Pero el enojo y la rabia me impiden quedarme quieta, en cosa de dos segundos hablo por el micrófono hacia la policía pidiéndole un médico y una ambulancia para Jeanne. Apenas termino de decir el mensaje tomo la pistola con mis dedos y persigo a Beatriz por el pasillo, dejando a Jeanne atrás con el dolor de mi alma, pero no la puedo dejar escapar.
Beatriz ya va llegando al final del pasillo cuando suelto el primer disparo, directo hacia su cabeza, pero la distancia y mis nervios al sostener el arma hacen que solo logre darle en la espalda, por su lado derecho. Beatriz se va hacia un lado y apenas logra afirmarse con la pared. Pese a ello sigue caminando y yo corro para llegar a su posición. Cuando creo que ya la tengo Beatriz se mete en otra de las habitaciones y cierra la puerta.
El dolor y la rabia me carcomen, la imagen de Jeanne en el suelo y toda la sangre perdida, sumándole que quizás son los últimos momentos en que siga viva y nos los podré tener... Decido disparar hacia la cerradura de la puerta y esta cede, permitiendome entrar.
Beatriz está en el centro de la habitación, sentada en una de las sillas intentando con sus manos controlar la hemorragia.-No pensé que llegarías tan lejos, Emma...-dijo observándome y respirando agitadamente.
-Como tu lo has dicho Beatriz, la venganza es dulce-dije sincera y adentrando me en la habitación, sin dejar de mirarle ni un segundo y apuntándole con mi arma.
-Tu novia ya está muerta, ahórrate el llanto y sé mujer por una vez Emma, dispárame-dijo Beatriz abriendo sus brazos y casi cayéndose hacia un lado de la silla en el intento. Su vestido resplandecía del rojo de su sangre, posiblemente era una de sus últimas jugadas distraerme con mi mente y no se lo permitiría.
-Lo está y créeme que lo haré, pero antes confieza que mandaste a matar a Alisa Nizzari-dije gritándole y Beatriz sonrió en respuesta.
-Yo no he hecho tal cosa-dijo feliz y yo me contuve para no dispararle de inmediato. El arma de Beatriz se hayaba en alguna parte de su vestido y sabía que si yo no la mataba primero ella lo haría conmigo, sabía que algo planeaba pero no sabía qué, hasta que vi sus ojos por un segundo observar el techo. Allí un enorme candelabro cubría la mayor parte de la habitación, incluida a ambas.
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Divina Vida
RomanceEmma ya no tiene más razones para vivir, el destino le juega una mala pasada y termina trabajando para una de las mujeres más importantes del país: Jeanne Nizzari, conocida por ser fría y calculadora, sin sentimientos, llegará por casualidad a la v...