¿El primer amor es el más importante?

Epílogo.

-¿Estás listo, Bell?-Preguntó Welf a su compañero.

-Sí... Eso creo, mentiría si dijera que no estoy nervioso pero... ¿A quién quiero engañar? ¡Me muero de los nervios!-Contestó con un ligero dolor en el estómago y su cabeza dando vueltas.

-¡No digas tonterías maldito conejo! ¡No puedes echarte para atrás! ¡Te asesinaremos si haces sufrir a nuestra diosa!-Gritó un elfo mientras apuntaba con su bastón el cuello del peliblanco.

-Y a Helun-Complementó cierto elfo oscuro, desenfundando su espada.

-Ya ustedes dos, Hedin, Hogni-Una voz imponente les reclamó. Se trataba de Ottar.

Ambos se bajaron armas y dieron un paso atrás.

El boaz volteó hacia Bell quien saltó del susto.

-No malinterpretes esto. Si no te presentas me les uniré-Declaró "El Rey" con un aura amenazante emanando de su cuerpo.

-¡Hiiiiii!-El joven se asustó y pegó un chillido parecido al de un conejo.

-Tch. No seas un cobarde. Todavía tienes el descaro de proponerle un Harem y para colmo esas tres son tan tontas como para aceptar-Dijo un arrogante hombre lobo recargado en la pared.

-¿A quién le dices "tonta"? Perro sarnoso-Preguntó Allen con claras intenciones asesinas.

-¿Eh? A ese trío de ciegas que se fijaron en este tomate miedoso, maldito encaró a Allen.

-El reino de la oscuridad desea reclamar un campeón-Dijo el elfo oscuro.

-¿Are?-Todos voltearon hacia Hogni, ladeando la cabeza.

-O sea que quiere ver sangre para comprobar quién gana entre esos dos-Explicó Hedin, acomodando sus lentes.

-Tranquilos todos. En primera no creo que le puedan hacer algo al "Héroe de Orario" No por nada derrotó al dragón negro-Finn separó al hombre lobo y al hombre gato.

-¡Esa fue pura suerte! ¡Nosotros nos partimos el culo para darle tiempo y cargara su habilidad!-Dijeron al unísono Allen y Bete.

-Es gracioso lo parecido que son ambos-Comentaron algunos susurros en la sala.

-¿¡ESTÁN BROMEANDO!? ¡YO NO ME PAREZCO A ESTE IDIOTA!/¿¡ESTÁN BROMEANDO!? ¡YO NO ME PAREZCO A ESTE IDIOTA!-Dijeron ambos al mismo tiempo nuevamente.

-Ya, no es momento para pelear, al menos este día hay que fingir que todos nos llevamos bien-Comentó Hermes, tratando de calmar la situación.

-¡NUNCA!-Dijeron a la distancia el hombre lobo y el hombre gato.

-¿Q-Qué no era así?-Preguntó Bell.

-Eres muy crédulo-Le dijo Welf, negando con la cabeza.

-¡Los carruajes ya vienen!-Avisó Raúl, entrando de repente.

-Ya no puedes escapar. Vamos-El pelirrojo empujó hacia adelante a su amigo.

Se preguntarán ¿Qué estaba sucediendo? Simple... La boda entre los enamorados había llegado.

Resumen de los eventos anteriores.

El camino a ella fue muy difícil ¿Saben? No por complicaciones en la relación ya que, curiosamente, las tres chicas congeniaron muy bien. Si no por culpa de cierto conejo que adora meterse en problemas.

Ni una semana pasó antes de que casi muriera junto con su familia en el calabozo debido a una expedición que salió mal y en la que se vio envuelto en una situación comprometedora con Ryuu. Ni el mismísimo Juggernaut que le arrancó un brazo y le rompió el cuello al conejo estuvo tan cerca de matarlo como Tiona, Helun y Freya cuando se enteraron de lo que hizo con la mejor amiga de esta última, a pesar de que no fue como ellas se imaginaron.