¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Me desperté de un salto al escuchar los fuertes y constantes golpes en la puerta del departamento. Froté mis ojos con mis manos y observé el reloj a un lado de mi cama.
Eran las 7:05 de la mañana. ¿Quién mierda viene a tocar a mi casa a esta hora?
Solté un chasquido y llevé mi mano a mi cabello para sacudirlo y arreglarlo un poco. Mi mirada viajó a un costado de la cama y allí estaba _______ quien al poco tiempo se removió incómoda y abrió lentamente sus ojos.
La ví incorporarse aún en la cama y se estiró un poco, todavía parpadeando lentamente.
—¿Qué horas son? —preguntó.
—Las 7 de la mañana.
Sus ojos se abrieron y me observaron, quizá#s esperando que fuera alguna broma de mi parte. Pero no. Eran las jodidas 7 de la mañana.
—¿Quien está golpeando la puerta? —se quejó en un murmullo— La van a romper.
—No sé quien es, acabo de despertar. —quité las sabanas de mis piernas y me senté en la orilla de la cama mientras buscaba mis pantuflas con los pies. Una vez las encontré me las puse y me levanté de la cama— Iré a ver quién es y qué quiere.
—Mhm.. —asintió, frotando sus ojos suavemente— Prepararé café..
—¿Podrías prepararme chocolate? Por favor. —pedí sonriéndole antes de salir de habitación por completo.
Caminé con completo desdén hacia la entrada, escuchando las pisadas de _______ salir del cuarto y pasar a la cocina. Solté un bostezo cuando finalmente llegué a la puerta y cuando mis labios se cerraron decidí abrir.
—¡SENJU!
Ah... De alguna manera no me sorprende que sea él.
—Takeomi, hol-...
—Nada de "Takeomi". —exclamó y yo lo miré confusa por el enojo e incredulidad en su rostro— ¿Cómo es eso de que tienes novia?
—... ¿Quién te lo dijo?
—Yo. —aquella voz familiar que desde hace un buen rato no escuchaba se hizo presente mientras la persona dueña de la misma se mostraba.
Abrí mis ojos en plano y lo observé por un buen rato antes de sonreírle ampliamente y acercarme para abrazarlo con fuerza.
—Sí, sí. —palmeó mi espalda— Yo tambien.. Te extrañé.
Después de un tiempo nos vimos forzados a separarnos debido a que Takeomi tomó mi hombro y me giró hacia él.
—¡¿ENTONCES ES CIERTO?!
—Sí Takeomi, tengo novia. —suspiré, y pareció que a Takeomi que se le salió el alma por la boca— Se suponía que en dos días iría a decírtelo junto a ella pero veo que alguien no mantuvo su boca cerrada.
Él sonrió con gracia y un tanto perversión antes de mirarme aún con su leve sonrisa.
—No pude esperar. —se alzó de hombros— Como sea, ya estamos aquí y quiero conocer a mi cuñada, ¿Está aquí?
—No creo que su novia esté en el departamento a esta hora-
—Oh sí, aquí está. —en cuanto hablé Takeomi me observó fijamente por un buen rato. Fingí demencia y les invité a entrar— Adelante, pasen.
Y los dos entraron como si de sus propias casa se tratase. Cerré la puerta y caminé con ellos hasta el salón donde estaba _______ dejando una bandeja que contenía cuatro vasos y un pequeño plato lleno de las galletas que compramos el día anterior en un mini-market.
—¿_______? —mi hermano hizo presencia nuevamente mirándola con el ceño fruncido mientras seguíamos acercándonos hasta la mesa— ¿Qué haces tú aquí?
—Oh, bueno... —_______ tomó uno de los vasos y se acercó a mí para darmelo— Aquí tienes linda, con tres de azúcar. —lo acepté gustosa viendo como el ceño de Takeomi se fruncía cada vez más. Debía admitir que de cierta forma era gracioso— Yo soy la novia de Senju.
—¡¿CÓMO?! —la voz del mayor salió más agua de lo normal, quizá debido a la sorpresa.
Por su parte, Haruchiyo miraba todo confuso y un tanto entretenido. Siempre le fue gracioso el molestar a Takeomi y _______ era buena en eso, seguramente se llevarían bien. Así que después de un rato, mientras Takeomi nos miraba con los ojos abiertos a más no poder, Haru decidió acercarse a mi chica para hablarle.
—¿Cuál es tu nombre?
—_______ [T/A].
—Mhm... —él entrecerró sus ojos— Haruchiyo Akashi.
—Es un gusto. —respondió mi chica calmadamente mientras tomaba uno de los vasos y se lo extendía— Realmente no esperábamos tenerlos aquí pero aún así hice un poco de té, por favor acéptelo.
Haru lo pensó un rato pero después aceptó el vaso y guardó silencio mientras _______ tomaba otro vaso y le daba un sorbo a su contenido.
—¿Cuantos años tienes?
—21.
—Así que se llevan dos años... —ella asintió, se lo estaba tomando con bastante tranquilidad— Ah, en realidad me da igual. Solo espero que no le hagas nada a esa idiota albina o realmente lo pagarás muy caro.
—¡Tú también eres albino naturalmente, idiota! —lo miré mal y Haru no tardó en devolverme la mirada. Escuchamos a _______ reír un poco por ello. Takeomi quedó en pausa definitiva porque no se movía y quién sabe si todavía respiraba.
—No se preocupe, Haruchiyo. —habló ella acercándose a mí y me sentí nerviosa por ello, pero seguramente logré disimularlo— Lo último que intentaría sería hacerle daño a esta chica.
Sentí mi rostro calentarse luego de sus palabras así que en un intento de que no lo notaran bajé la cabeza, sin embargo no pude evitar no sonreír ante eso.
