CAPÍTULO IX: PÉTALO DE LILA

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Y así pasó 1 mes desde la segunda noche de Hank en el hospital, durante ese tiempo tuvo la oportunidad de hablar con Livi y Anne siempre que fuera posible (En sí, todas las noches), le encantaba lo sencillo que era tener charlas con Livi pero a la vez le fascinaba cantar o componer canciones con Anne, y aunque al comienzo fue algo complicado también comenzó a ganarse la confianza de Lucy poco a poco, al menos ella ya lo veía a los ojos cada que hablaban y no lo hacía con una mirada un poco temerosa, pero aún se seguía sintiendo tensión, una desconfianza por parte de Lucy hacia Hank, pero él jamás se lo tomó a mal, simplemente aceptó que cuando Lucy estuviera lista ella se abriría un poco más con él.

La terapia también estaba marchando correctamente, en la última semana Lucy había mantenido el control casi por completo, de vez en cuando salían Anne o Livi para hablar con Hank, pero sólo lo hacían durante las noches, ya no interferían en las actividades de Lucy para nada. Por otro lado, Hank también se encontraba mucho mejor, su terapia avanzaba correctamente, pese a desvelarse casi a diario, todo lo que hablaba con Anne y Livi lo ayudó a sentirse mejor, la compañía de ambas hacía que su estadía en aquel lugar tan sombrío fuera algo mucho más tolerable.

Hank se encontraba comiendo tranquilamente en su hora de almuerzo, estaba muy cansado, debía dejar de desvelarse tanto pero no quería dejar de hablar con Anne ni Livi, ya que Lucy les permitía salir únicamente en las noches, pero si Hank seguía así quizás hasta enfermaría o desarrollaría algún trastorno del sueño.

El día terminó y Hank fue a su habitación, esperaba encontrarse con Lucy en el camino para decirle que esa noche deseaba dormir temprano así que no hablaría con Anne o Livi, pero no pudo hacerlo ya que Lucy se había adelantado y ella ya estaba en su habitación. Hank no tuvo más remedio que esperar a que Anne o Livi lo llamaran y decirles que esa noche no podrían charlar como de costumbre.

Como siempre, cuando las luces fueron apagadas Hank escuchó que lo llamaron desde el otro lado del muro, se acercó dispuesto a decir que esa noche quería descansar.

—Hola, no sé si hablo con Anne o Livi, pero debo decirles algo... —Comenzó él.

—Ni la una ni la otra, hoy hablas conmigo Hank, con Lucy —Le respondió.

Hank estaba adormecido pero al oír eso su sueño desapareció completamente, era algo histórico: Lucy estaba hablando con él a través del agujero en el muro. Ya había tenido la oportunidad de hacerlo en 2 ocasiones pero Livi y Anne interfirieron, quizás ahora que Lucy tenía más control sobre ellas finalmente podrían hablar.

—Vaya, no me esperaba que fueras tú Lucy ¿Pasa algo? —Preguntó Hank.

—Sí, Verás... —Lucy sonaba algo triste—, Lo cierto es que quería hablar contigo, más que nada para darte una explicación del por qué de mi comportamiento distante y desconfiado hacia ti.

—Claro. —Ahora Lucy tenía toda la atención de Hank— ¿Qué pasó?

— Verás... Desde que tengo 17 años mi sueño ha sido dedicarme a la actuación pero hasta ahora no he podido lograrlo, lo cierto es que antes de conocer ese maravilloso arte yo hacía nada ni pensaba en nada, no sé si Anne o Livi te lo hayan dicho, pero mi padre fue a prisión cuando comencé a vivir con mi "Ex-Novio". Mi padre era alcohólico y abusivo, lamentablemente mi ex-novio no era muy diferente a él, un día tuve un incidente con él y... —Lucy guardó silencio un momento, no sabía si contar eso o no —Bueno, no importa.

Hank no dijo nada, no quería interrumpirla, todo lo que Lucy le estaba diciendo él ya lo sabía porque Lucy contó un poco al respecto en la terapia de grupo a la que los hacían asistir, pero esta vez era diferente, por primera vez Lucy se abría directamente con él, y Hank quería escuchar lo que seguía.

AMOR POS BIPOLARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora