Consejo de Amor

Epilogo

Años después

Narra Gavi

Miro la pulsera que lleva en mi muñeca desde que leí la carta de Eric y no puedo evitar sonreír a recordar todo aquello, la decisión que tome cuando cumplí los 18 es algo de lo que no me arrepiento aunque a no todo el mundo le gustó la decisión.

Salgo de mis pensamientos cuando siento a alguien abrazarse a mi pierna y sonrío bajando la mirada, encontrándome a la niña más bonita del mundo que se ganó mi corazón hace casi 3 años.

Gavi: Dani, ¿Qué te pasa?
Daniela: Papá viene a por mí, estamos jugando al monstruo de las cosquillas con Isaac.
Gavi: ¿Y puedo jugar?
Daniela: No papi, tú no.

Se suelta de mi pierna y sale corriendo, provocando que me ría.

Gavi: Daniela García Páez, ven aquí.
Daniela: No.

Río bajando y me cruzo con el otro monstruito de la casa, que está siendo perseguido por su padre. Aquel chico al que le di otra oportunidad hace años y no me arrepiento.

Eric: Isaac Páez García, no huyas.
Isaac: Papá, papi me quiere hacer cosquillas.

Río mientras mi hijo se esconde tras de mí y cuando tengo al catalán delante me dan ganas de seguir riendo, pero me contengo.

Gavi: ¿Qué me han dicho los peques? ¿Estás en plan monstruo de las cosquillas?
Eric: Tenemos dos terremotos por hijos, ¿Qué quieres que le haga?

Escucho la risa del pequeño y sale corriendo en la misma dirección de su hermana. Y ahí ya Eric y yo estallamos a carcajadas.

Eric: En 3 días su cumpleaños.
Gavi: Y parece que fue ayer cuando los encontramos en la ciudad deportiva.

Suspiro pasándome la mano por el pelo porque no puedo evitar sentirme mal porque los mellizos no celebren su cumpleaños el día que nacieron, sino el día que los encontramos.

Miro a mi pareja y él me sonríe además de abrazarme, gesto al que sin duda correspondo.

Gavi: ¿Sabes en qué me ha dado por pensar?
Eric: ¿En que?
Gavi: En el día que cumplí los 18.
Eric: El inicio de todo.
Gavi: Oficialmente hablando.
Eric: Cierto, había empezado algunos años antes.

Sonrío y le beso, gesto al que corresponde sonriendo, él y los peques son lo mejor que tengo, no tengo duda.

Y la verdad, saber que Lucas no volverá a acercarse a nosotros nunca más me da muchísima tranquilidad, sobre todo por Isaac y Daniela. Unos días después de mis 19, intentó entrar en casa de Eric, no contaba con que el catalán tenía alarma y esta saltó avisando a la policía. Él asturiano intentó huir, pero le acabó atropellando un coche mientras escapaba de la policía, murió en el acto.

Me separo de mi novio volviendo a la realidad cuando oímos unos ladridos que vienen de arriba, y al nada aparecen nuestros dos enanos con sus abrigos y sus guantes puestos junto a Bolt, nuestro perro y el bichito de la familia. 

Ya estamos casi en fin de año, hace bastante frío y además me parece que había posibilidad de nieve.

Gavi: ¿Ahora no huimos?
Daniela: Ha empezado a nevar papa.
Isaac: ¿Podemos ir al jardín con Bolt a jugar con la nieve?
Eric: Id yendo, ahora vamos nosotros, tenemos que hablar una cosa, pero ponedle a Bolt sus botas para que no se hunda y se haga daño en la pata como el año pasado.

Los peques van al patio seguidos del perrito, y yo miro a Eric fijamente

¿Qué hay que hablar?

Gavi: ¿Pasa algo?
Eric: No tranquilo, está todo bien.
Gavi: ¿Entonces de que quieres hablar?