Will
—Te traje gelatina —dice Aitana con un pequeño vasito en mano.
—Es la cosa más horrible del mundo, te dije que no me gustaba eso.
—Lo siento... fue lo único que la señora de la cocina tenía.
Su mirada cae al piso de inmediato. No aguanta una observación. ¡Por Dios!
—Igual me lo comeré, ¿está bien, princesa? —digo y Aitana de inmediato me mira.
Hace tiempo no me refería a ella como mi princesa y sé que le gusta. Me entrega la gelatina y me la como gustoso, ella me ve sonriendo.
La observo balanceándose en sus pies y mordiendo sus labios. No puede mentirme, sé que algo le pasa.
—Ya suelta lo que tengas que decir.
—No es nada, lo juro.
—Aitana...
—¿Quieres que veamos una película? —pregunta de pronto evadiendo lo que sea que quiera decirme.
—Aitana, sabes que te quiero, ¿verdad? —Intento tomar su mano pero esta da un paso atrás.
—Will no hagas eso por favor.
—Tú también me quieres.
—Claro que te quiero.
—Lo sé, ahora ven y acuéstate a mi lado, quiero dormir contigo, oler tu pelo, como antes.
Aitana muerde sus labios, luego traga en seco y niega con su cabeza.
—Debemos dejar de mentirnos. Me iré, cuando estés mejor me iré de casa.
¿Qué mierda está pasando aquí?
—No lo harás.
Estoy seguro que no lo hará, después de todo ella y yo estamos hechos para estar juntos.
—Estoy hablando en serio Will...
«Ella pronto recapacitará y se dará cuenta, como siempre, que soy lo único que tiene. »
Tiro el recipiente vacío de la gelatina en el cesto de basura, no cae adentro y no podría importarme menos.
—¡Deja de ignorarme, por favor, Will!
—Disculpa por todo los malos entendidos, ¿sí? Te quiero.
—No puedes seguir haciendo esto. Con disculpas esta vez no me vas a convencer de quedarme.
—¡Soy lo único que tienes! —le grito y ella se encoje de hombros. Su piel se eriza, se abraza a sí misma y cierra los ojos.
—No es cierto —dice con voz entrecortada.
—Tus amigas tienen su perfecto mundo, y déjame decirte Aitana por mucho que quieras no encajamos ahí. Nosotros estamos hechos para otras cosas.
—Es lo que tú crees. No estoy sola y deja de decirlo por favor.
—¿Ellas saben que te saqué de un jodido prostíbulo?
Se tapa la boca y sus lágrimas amenazan con salir, luego inconscientemente toca el tatuaje en su muñeca, el tatuaje que oculta su pasado. Por mucho que ella quiera tratar de encajar con sus amigas perfectas nunca lo logrará o de otra manera su pasado no sería un secreto.
«Aitana no se irá de mi lado.»
—Will no hagas esto, no me obligues a quedarme contigo por favor...
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Nunca es Suficiente, Serie LOCO AMOR 3
Romantik"El amor a veces duele." ¿Se puede amar a dos personas a la vez? La respuesta más sencilla y tal vez la más lógica debería ser un rotundo no, pero, ¿cómo se lo dices al corazón? Una sola noche bastó para que la vida de Aitana tomara un camino distin...
