CAPÍTULO 29

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Aitana


Han pasado cuatro meses desde que me fui de la casa de Daniel y mi vida poco a poco va tomando forma, es difícil vivir con las secuelas que dejó Will en mí, Daniel es paciente conmigo y me apoya, hoy confío más en él que en nadie y he aprendido a derrumbar de a poco las barreras que me autoimpuse y me impedían entregarme por completo. Al principio era todo raro pero con ayuda y apoyo de expertos voy avanzando.

Las chicas han vuelto a la ciudad, por fin, con excepción de Alexa que seguía desaparecida con sus padres. Empieza a notarse la barriguita de Marifer, seremos tías. Gracias a Dios Alex ha sido exonerado de todos los cargos en su contra, Larissa se llevó la peor parte, vivirá postrada en una cama por toda la vida y en el proceso hicimos una conocida, Amelia Clark. Tal vez con el tiempo lleguemos a ser amigas, aún nada está dicho.

Al fin pude contarles a las chicas sobre mi pasado, ellas me dijeron que era una boba por pensar que eso afectaría nuestra relación. Aún seguía yendo a mis citas una vez al mes con mi psicólogo. Daniel y yo no volvimos a hablar de vivir juntos o de matrimonio, él aún me espera. Empecé a ver un especialista en fertilidad para tratarme, en un tiempo comenzaré un tratamiento y tal vez con suerte en un año o dos pueda tener ese hijo tan deseado. Daniel, como el caballero en su blanca armadura que es, siempre me acompaña a mis consultas y a todos les dice que soy su esposa.

«Solo yo para pensar en tener hijos antes de pensar en casarme. »

Alda se mudó hace tiempo con su nieto y bisnieta para ayudar en la casa. Mentira. Ella quiere estar con ellos, solo que es un secreto a voces. André, ese guapo Maxwell es una joya. Se ha establecido permanentemente en la ciudad. Daniel le está enseñando todo lo que tiene que saber sobre el bufete de abogados, mi dios griego dice que él será un mejor sucesor de su abuela de lo que él nunca fue.

Sí, mi chico al final se saldrá con la suya y dejará el bufete en un tiempo. André se convirtió en el hermano que siempre quise tener, Lucca estaba más que celoso por lo que iba a verme regularmente al Mystic, los problemas con su hermana no le dejaban mucho tiempo, aún me pregunta por Alexa y tiene una fotografía de ellos dos juntos en su billetera. La sigue amando.

Programamos un viaje para raptar a nuestra amiga pero eso no será posible hasta dentro de dos meses que Marifer pueda subirse a un avión sin problema. Alex no le desprende vista, su loco sueño de tener una escuela de baile y un parque de motos se ha hecho realidad y es todo un éxito, tan loca su idea como ellos. Ahora los papás pueden ir a dar rienda suelta a la adrenalina mientras sus hijas están en clases. Nadie creyó que funcionaría y están haciendo mucho dinero de ello.

Daniel me hizo socia del Mystic, algo que no quise pero otra vez me engañó y plasmé mi rúbrica sin mirar qué firmaba. «Por favor lean antes de firmar cualquier cosa o terminarán casados. » Quise contratar un abogado para anular ese documento pero Alda me hizo prometer que no lo haría, dijo que para Daniel eso es importante, así se sentía seguro que no lo dejaría, así que es nuestro acuerdo no hablado, una promesa de estar juntos. Es tonto, lo sé.

—¡Aitana! —grita André desde las escaleras.

«Es mi noche para apoderarme del escenario. »

Miro la fotografía de nosotros junto a la de Sari en el escritorio y es inevitable pensar que hace unos meses atrás, todo empezó aquí.

Vine tratando de escapar de mi realidad y terminé encontrando a Daniel.

—Es tu turno, amor —dice Daniel desde la puerta.

¿En qué momento llegó? No tengo la menor idea.

Termino de firmar el último recibo y lo guardo dentro de la carpeta del club.

Nunca es Suficiente, Serie LOCO AMOR 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora