Nunca es Suficiente, Serie LOCO AMOR 3

CAPÍTULO 21

Aitana

Will por fin se encontraba instalado en casa. Su semblante era mejor aunque su carácter había vuelto a ser explosivo. Estaba cariñoso pero sé que era su manera de lidiar con nuestra ruptura.

Él es un buen hombre y se merece a alguien que lo ame al cien por ciento. En el momento en que dejé entrar a Daniel entendí que lo que tenía con Will no era lo que yo esperaba en una relación.

Adele con One and only suena en mis auriculares mientras tomo un último sorbo de mi café y le doy enviar al correo que escribí para Daniel, con todo lo que mi cabeza maquinó para la abuela Alda. Estaba emocionada con el hecho que Daniel y yo cada vez parecíamos más un equipo aunque me aterraba que la verdad de mi pasado saliera a la luz.

Miro una vez más el folleto en mi mano del catering que me pareció el ideal para la recepción y estaba más que emocionada, lo dejo en la mesa junto a los otros folletos y espero la respuesta de Daniel.

A los pocos minutos la notificación de un mensaje llega a mi móvil. Es él.

Daniel: Me encanta todo, bien hecho pequeña. ;)

Muevo mis piernas alegre por su respuesta. Eipril es siempre la que se encarga de este tipo de cosas y creo que le he aprendido mucho en todo el tiempo en el que somos amigas.

Yo: Gracias jefe.

Daniel: Me iré a media noche. Hay un boleto para ti, espero que cambies de opinión y vengas conmigo. Hay mucho de lo que debemos hablar. No más secretos.

No más secretos. Daniel quiere compartir todo conmigo, pero, ¿yo puedo hacer lo mismo con él? ¿Puedo contarle mi vida? ¿Abrir las heridas del pasado que nunca sanaron, por él? No lo sé.

Miro mi maleta vacía en el borde de la cama y cierro la laptop de golpe, me quito los auriculares y la tristeza que tanto odiaba está ahí una vez más. Por eso era bueno Will, a él no le interesaba mi pasado, me aceptó así y lo amé por ello, ahora no sé si eso fue sano.

«Si me voy con él en este viaje sería aceptarlo definitivamente.»

Me levanto de la cama y voy hasta la sala donde Will se encuentra. Debido a que la silla de ruedas no cabía por el pequeño pasillo debimos instalar una cama en la sala para hacerle más cómodas las cosas. Aún se encontraba adaptándose y no era nada fácil para él.

—Hola —le digo llamando su atención.

—¿Es hora de irte a cantar?

Daniel cumplió con su palabra y nos dio un mes libre a todos y todo estaba pagado dijo que era por la remodelación, él y yo sabíamos que era porque quería que viajara con él sin que el Mystic interfiera.

—De hecho no. Will, tengo que salir de viaje.

—¿Con tu jefe? —deja su móvil de lado y me mira sin ninguna expresión en su rostro.

—Se llama Daniel y sí, iré con él.

—¿Quieres escalar rápido en la rama laboral? —pregunta sin esperar ninguna respuesta.

—¡Will basta, por favor! No es necesario ser hiriente ahora.

—Me conoces cariño y si quiero puedo herirte más de lo que acabo de hacer con un simple comentario. Creí que te aburrirías pronto de todo con tu jefe.