.XI.

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-Regulus: ¡Sirius! ¡Mira!

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-Regulus: ¡Sirius! ¡Mira!

Entró el pequeño Regulus a la habitación de su hermano con un sobre en la mano.

-Sirius: Shh Reg, baja la voz- le reprendió pero con una sonrisa- ¿Y eso es...?

-Regulus: ¡Mira!

El niño extendió ambas manos dejando ver la carta. En ella se podía el sello rojo de Hogwarts y la dirección de su hogar, 12 de Grimmauld Place.

-Sirius: Whoa, eso es increíble- dijo abrazando a su hermanito- Feliz cumpleaños Reg.

-Regulus: ¡Vamos ya al Callejón Diagón!

-Sirius: Venga vamos.

Ambos chicos se alistaron y bajaron al salón principal, mismo en el que se encontraba la chimenea de red flu.

-Walburga: Sirius, eres el mayor así que toda responsabilidad recae sobre ti. ¡Kreacher!- llamó al viejo elfo- Entrégale a Sirius la bolsa con galeones- el elfo obedeció-.

-Kreacher: Tenga heredero Sirius, la bolsa contiene doscientos galeones- hizo una reverencia-.

-Walburga: Cuídalos bien, el dinero no crece de los árboles.

-Regulus: Pero madre, somos ricos- dijo en un susurro-.

Sirius, quién tenía la mano del menor cogida, la apretó para que el menor le mirase y le reprendió con la mirada.

-Walburga: ¿¡Sabes todo lo que tenemos que hacer tu padre y yo para conseguir esta fortuna!?- le apuntó con un dedo acusadoramante mientras con su otra mano agarraba fuertemente su varita-.

-Regulus: Perdón, madre- bajó la mirada al piso-.

-Sirius: Perdónele madre, es aún temprano y todavía no sabe lo que dice- volvió a reprenderlo con la mirada- Con su permiso, nos retiramos o se hará tarde. Nos vemos más tarde, madre.

Ambos muchachos entraron a la chimenea y, cogidos de la mano, Sirius pronunció las palabras "Callejón Diagon" al tiempo que soltaba un puñado de polvos flu.

Aparecieron enfrente de la tienda de mascotas. Ellos no comprarían una pues la familia Black poseía una gran cantidad de aves, como es el caso de Orfeo la cual era el búho real de Sirius.

-Regulus: Mira Sirius, ¡Cuántas tiendas!

Ambos hermanos se dirigieron a madame Malkin quien se encargaría de las túnicas tanto de Regulus como de Sirius.

-Madame Malkin: Buenas jóvenes muchachos, ¿Hogwarts?

-Sirius: Así es, señora Malkin. Primer año y segundo- se señaló a él y a Reg-.

-Madame Malkin: Bien, pasa tu primero, guapo.

Sirius subió a un taburete mientras que la bruja comenzaba a tomarle las medidas.

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