Capítulo 11-01

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Hunter

Un año más y salgo de está cuidad pequeña, con mentalidad cerrada y absurda. Otro día más salgo al parque a correr, es mi único escape junto con la música. Me encanta ver como los niños pequeños salen a correr y a jugar en los columpios y resbaladillas. Aunque tengo que admitir que me da risa cuando un niño se cae, me siento cruel como persona, pero es algo genuinamente gracioso.

Sentí algo vibrar en mi pierna, anunciando la llegada de un mensaje, el problema es de quien será el mensaje. Esperemos que no sea de mi hermano o de mi papá.

Garret:

¿A qué no adivinas quien tiene una nueva victima para los encantos de esquesuema?

Yo:

Tu perro

Garret:

Gracioso, pero yo, tendré una cita con ella mañana y tiene una amiga, tal vez te la presente y dejes de pensar en Miranda.

Yo:

Miranda es la indicada, mi único error no fue notarla antes.

Garret:

Te dejo porque no soporto que hables de Miranda y sus inigualables características, ni siquiera está bonita, para que soporte lo toxica. Al igual tu eres bien toxico, así que tal vez son tal para cual.

Yo:

Ok

Detesto que Garret esté en contra de Miranda, sé que al inicio yo le gustaba a ella, pero la ignoraba porque me gustaba alguien más, pero después de tiempo empecé de alguna forma atraerme. Sin embargo, ya era tarde cuando se lo confesé, ella ya me había empezado a olvidar. La lucha era infinita para regresar con ella y aún estoy tratando que se enamore de mí.

Ya se estaba anocheciendo haciendo un signo de irse de nuevo a la casa, espero que nadie esté para fumar antes de dormir.

-

La luz que se colaba por las persianas me despertaba, es una desventaja de tener el sueño ligero, cualquier cosa me despertaba e inclusive algunas veces no me dejaba dormir bien, solamente cuando fumaba. Al ver la hora en el celular y varias notificaciones de Miranda, hace que me levante de golpe y busque el uniforme para irme rápido. Ventaja numero uno de mí, tengo carro, la segunda es que vivo cerca de la preparatoria.

Le mando un mensaje de buenos días a Miranda con una disculpa que me quedé dormido esta vez, que no pasará de nuevo, pero ella no contesta. Rápidamente salgo con lo primero que vi, sin importar que mi sudadera combiné con mis tennis y jeans. Al llegar al estacionamiento de la prepa, me relajo porque al menos me dejaron entrar y llegar o perderme por ahí en el estadio.

Voy caminado a el edificio y veo a Marcus recargado en su carro, se ve que está observando a alguien porque no deja de ver a un lugar fijo. Lo sorprendo y se asusta de golpe, haciendo que ría.

— ¿A quien miras?

le preguntó y él se voltea molesto, dada mi pequeña sorpresa.

— A nadie, solo vi a una chava caminando como loca.

Se encoje los hombros y dándole un sorbo a su café.

— Probablemente es de último año, todas así están de locas y más por la dieta. — le digo, Marcus me sigue la corriente, pero su rostro es el mismo.

— ¿Lo dices por experiencia?

— Sí, salir con una de último año puede ser estresante, desde el verano se ponen histéricas, por eso rompí con ella.

— Todo un fuckboy, felicidades Hunter, todas caerán por ti.

— Manifiéstalo por favor,

Marcus se ríe, sabe que puede llegar a ser una verdad. Pobre de él, nunca tiene parejas o quedantes, todo en él grita, soy una persona seria e inteligente, pero no más que yo y él lo sabe.

Entramos a nuestro edificio y veo una Miranda irritada, le trato de hacer cara de perrito triste, pero no cambia su expresión, dándome la señal que está enojada por algo más que no responderle ayer.

— ¿Qué hice mal, ahora? — le preguntó volcando los ojos.

— Que no hiciste mal, me dejaste plantada, pero así quieres que esté contigo.

— Me quedé dormido y tú tampoco no me recordaste que íbamos a salir el día de ayer, así que no me culpes.

— No me cambies las cosas — exclamó Miranda con los ojos llorosos, pero solo es chantaje por parte de ella.

— Es la realidad, que tu te quieras hacer la víctima es otra cosa.

— Chicos adentro — dijo la maestra algo enojada, tal vez por el espectáculo que estamos dando afuera del salón.

Al entrar al salón todos estaban en sus cosas, mis amigos estaban callados, probablemente ya los estresa escucharme de Miranda, especialmente Garret. Aunque sea uno mis mejores amigos junto con Marcus, Dixon y Derek, es el que menos tolera el drama, el cree que el mundo sería mejor sin guerras y drogas. No lo niego, pero nunca será una realidad, en toda bondad existen los celos y de ahí nace el dolor. Es más probable que haya personas tristes, sufriendo que personas felices.

La clase pasó rápido y lo agradecí, ni siquiera puse atención a la clase, en teoría no la necesito, así que estudio solo lo que vendrá en el examen. Voy directo a clase de psicología y hace que me relaje saber como piensa las personas individualmente. Me encanta saber que, porque más una persona juré que es diferente, son los mismos patrones que utiliza otra persona. Todos se quedan viendo a la izquierda cuando mienten, todos los seres humanos somos manipuladores, solo que algunos lo usan más frecuente o más fuerte.

— Hola Hunter — dice una voz melodiosa, al ver a Sasha sonreír por inercia me hace sonreír.

— Hola — le contestó

— Haré una fiesta con el grupo en casa de Dixon, ya sabes que él siempre pone la casa.

— Claro, iré — le respondo, honestamente no tengo ganas de hablar por lo de esta mañana con Miranda.

— Entonces ahí te veo — dice Sasha de alguna forma coqueta, pero no puedo regresarle el coqueteo ya que hay espectadores y se irán a decir a Miranda y no quiero más problemas.

La clase termino y me voy a mi casa, ya que psicología era mi ultima clase y hoy no tengo ganas de practicar kick boxing, tal vez más tarde salga correr y terminar mi rutina diaria. 




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Hi there, es mi pequeño capítulo de la perspectiva y el mundo de Hunter.

Siempre fuiste túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora