Siempre fuiste tú

Capitulo 26

Corría lo más rapido posible, sentía que mis pulmones iban a colapsar y mis piernas fallar. El simple recuerdo que mis padres van estar juntos a visitarme hace estresarme, ambos son lo contrario, pero algo que tienen en común es que ponen sus frustraciones en mí. Ni corriendo tres vueltas al parque hacia que mi mente se aclarara, todo se enfocaba en cómo ser la hija perfecta por tres días.

El plan era fácil, ropa combinada, peinar mi pelo lo suficiente para verse decente y estar callada todo el tiempo. Algo que siempre he escuchado que me digan que vivo en mi propia burbuja, tal vez lo haga pero es como un método de protección contra las personas.

Si muestras demasiadas emociones, eres alguien impulsiva e intensa
Pero si no muestras afecto o emociones, eres fría.

Busqué la banca más cercana para descansar y recuperar mi aliento, pero lo único que había cerca eran unos columpios. Me senté en aquel columpio rojo con miedo a romperlo, poco a poco me mecía tranquilamente, haciéndome recordar mi infancia y mi obsesión con los columpios.

Estaba tranquila columpiándome, veía como pocas personas corriendo al igual que yo hace un rato. La ausencia del perrito que siempre viene aquí es rara, era la única razón porque a veces venía a correr. Siento como mi celular vibra en mi bolsillo y hace una mínima pausa en la canción que estoy escuchando.

Jax con doble xx:
¿Quieres ir por tacos? Tengo hambre

Yo:

Quiero, pero acabo de hacer ejercicio

Jax con doble xx:

¿Tan mal está la situación ?
Tu nunca haces ejercicio, solo cuando es demasiado estrés

Yo:

Mi papá viene en tres días

Jax con doble xx:

Damm it, entonces si a los tacos?
Es que salí del entrenamiento y tengo demasiada hambre

Yo:
¿No importa si estoy sudada?

Jax con doble xx:

No, tacos son tacos

Hace días Jaxon agarró mi celular y cambió su nombre de contacto. No me opuse pero me causa gracia como puede ser ocurrente con el apodo.

Yo:
Bueno, si

Jaxon com doble xx:

Te recojo en 5 minutos

Me paré del columpio rápidamente, en mi intento fallido de ello casi me caigo, pero me reincorpore a como pude, lo único que no sobrevivió fue mi celular. Se había caído abajo del columpio y aún se reproducía radioactive en el celular. Observé que nadie me viese y agarre mi celular y me fui trotando a mi casa.

Justamente cuando llegué al depa Jaxon llegó.

Algo que olvidé mencionar, es que semanas antes a Jaxon le regalaron una moto por ganar un concurso estatal de matemáticas. Maldito Jaxon y su habilidad de poder resolver todo lo que se proponga. Siempre le ha dicho que debería ser ingeniero, pero adora la medicina.

— Te ves tierna toda roja — burlonamente dice Jaxon mientras trata de agarrarme mis mejillas.  Trato de esquivarlo pero ya es tarde, Jaxon jala mis mejillas como si fuese plastilina.

— Sabes que no me gusta que me agarres las mejillas

Jaxon se ríe y se le forman hoyuelos lo cual lo hace ver estilo Superman y más cuando usa sus gafas cuadradas.