Cuarta parte

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Estaba nervioso por la reacción que tendrían sus hijos al omega, Sabía bien como estos eran territoriales y sumamente celosos si de su padre se trataba; no quería que estos fueron groseros con el chef (especialmente los gemelos).

Tomó una respiración profunda Y rezo a todos los dioses por qué sus hijos se llevaran bien con el nuevo empleado, quien también parecía una bola de nervios, Temblando ligeramente por la anticipación de los que ahora en adelante serían sus comensales.

Elian y los gemelos jugaban cómodamente en el sillón, mientras que Alysa, Adara y Egan, dormían en el pequeño nido que tenían en su sala de juegos, siendo despertados por el olor familiar combinado con la esencia maternal y desconocida.

Alysa y sus regordetas piernas corrieron hasta la entrada del lugar, abrazando las piernas del desconocido con olor rico; restregando su cabecita rizada en las rodillas del hombre, chillando emocionada y feliz.

Sorprendidos por el chillido de su hermana, La manada Styles Se apresuró hasta la sala de estar donde se encontraban su padre, el omega y su hermanita.  

Elian dirigía a la manada, protegiendo a sus hermanos en caso de alguna emergencia, dando una mirada seria al omega bonito.

-Niños.- por fin hablo su padre.- Este es Louis, el nuevo chef.

-¿Nos va a alimentar?.- pregunto Alexis con un brillo en los ojos.

-Si, amore, yo te prepararé  toda la comida que te guste, me dijo tu papi que no te gustaban las comidas suaves.

-Ya lo amo, papá.- ni siquiera se pudo percatar de lo feliz que se encontraban su hijo con el chef después de que este le llamara papi

-¿Harás postrecitos con nosotras?.- y un par de cabecitas rubias le miraban con total atención.

-Claro, preciosas; incluso podré enseñarles más postrecitos.- y las niñas le volvieron a abrazar.

-¿Sabes cocinar dino-nuggets?.- incluso Harry se sorprendió de que el pequeño Egan se acercara al desconocido

-Si, precioso, ¿te gustaría cenar eso?.

-Si, por favor.

Solo faltaban los dos huesos más duros de roer, Alexander y Elian, quienes con los traumas dejados por su madre poco afectiva, Le tenían cierto temor y rencor a cualquier omega a su alrededor. Ambos cruzados de brazos y con sus miradas altivas y frías.

-Alexander, Elian, ¿Les gustaría algo en específico para cenar, amores?

Sus pequeños estómagos se revolvieron, según ellos todos los omegas eran como su ex-mamá- como llamaban a la omega que les dio a luz-, fríos, groseros y toscos. 

-Hamburguesas, por favor.

-¿Les gustaría ayudarme a prepararlas, cachorrillos?.

Ambos asintieron al mismo tiempo, con la misma expresión de sorpresa marcada en sus caritas.

-Iré a desempacar, y después pueden ayudarme.-la sonrisa que les dedico el omega les hizo enamorar.

-¿Podemos ayudarte a desempacar?.

-Si, preciosos.

Ambos alfitas, tomaron dos mochilas livianas pertenecientes al omega que les había enamorado en tan poco tiempo. Mientras este les hacía preguntas sobre su escuela y que les gustaba comer, desempacaron las cosas de Louis realmente rápido.

Y Harry estaba caliente y sorprendido por lo que el omega había logrado con sus niños





Harry todo el capitulo:

La reacción de Elian y Alex me recordó a cuando snowball de the secret life of your pets dice; ay ya caí

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La reacción de Elian y Alex me recordó a cuando snowball de the secret life of your pets dice; ay ya caí

¿Que opinan de los niños?

Y ¿de H?

Y de Loumummy?

cucina dell'amoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora