Parte veinticinco

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La pareja había decidido ir a revisar el restaurante, dejaron a sus hijos con Liam y Zayn mientras se disponían a hacer el trabajo.

El lugar está ubicado en una de las áreas más caras y elegantes de la ciudad, Louis lloró al llegar a su local.

Harry dejo todo para que el hiciera el proceso creativo, le dijo que contrataría a un diseñador de interiores quien haría todo el trabajo de la mano con Louis.

Cada pieza del lugar era perfecta, la cocina estaba lista para usarse ya que esta no requería de decoraciones.

El Omega bailaba de felicidad entre las mesadas, su atuendo que no era más que un par de leggings negros con corte v y una sencilla playera, más Harry siempre se veía provocado por el cuerpo de su chico.

El rebotar del trasero del más pequeño era sumamente encantador y desviaba la concentración del alfa de cualquier cosa que el chico estuviera diciendo.

Empezaba a calentarse.

El joven seguía contando totalmente emocionado lo que haría con su restaurante y los menús que quería implementar, más el hombre mayor quien comenzó a segregar feromonas excitadas; claramente no le puso atención.

El omega comenzaba a notar la excitación de su acompañante, más la ignoro, quería hacerle sufrir un poco; comenzó un balanceo de caderas que sabía que el hombre no perdería, mientras continuaba hablando del restaurante y los planes que tenia para este.

Llego a un punto en el que era claro que el omega estaba provocando a su hombre, fue bruscamente tomado por las caderas mientras le volteaban para besarle duramente.

Acariciaba la nuca del alfa mientras este dominaba el beso, un par de palmadas en su muslo le indicaron que debía hacer, dio un pequeño brinco para rodear las caderas de su amante; mientras este le acorralaba en un mesón. Sus piernas colgaban de este, el alfa rompió el beso y se inclinó para quitarle cuidadosamente sus converse, le instaló un pequeño beso en el tobillo y se deshizo de sus calcetines.

Rápidamente desaparecieron sus leggings y su bonito top, quedaba únicamente en la lencería que su novio le había regalado para navidad, un corpiño y unas bragas de encaje vino que abrazaban su cuerpo perfectamente.

Harry se sentía a morir, su pareja era la jodida gloria y era únicamente para el; necesitado, se aproximó al pequeño para retirar su ropa interior, mientras el únicamente bajaba la cremallera y desabotonaba su pantalón.

El omega estaba abierto por su reciente acción por lo que no vio la necesidad de dilatarle, el lubricante de Louis estaba esparcido por toda la mesada metálica. No espero más y se introdujo en el castaño.

No espero, comenzó a embestirle dura y constantemente, lo único que se escuchaba eran los vulgares chapoteos causados por el lubricante y la pelvis de Harry; entre embestida y embestida podía ver el miembro gordo de su pareja en el mismo.

—Ahhhh, Harry. !Mas!.

El alfa obedecía mientras jadeaba duramente en el oído de su pareja, unas cuantas embestidas más y fue capaz de liberar su orgasmo; cansado, espero a que Harry le tomará para llegar el también.

No tuvo que esperar mucho a que esto sucediera, mientras el nudo de alfa se hinchaba en su interior comenzaron a besarse tiernamente.

—Creo que inauguramos tu restaurante, bebé.




5/8

cucina dell'amoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora