Parte treinta

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La abstinencia los estaba conduciendo hacia una continua desesperación en la que ambos estaban deseándose continuamente, bullendo lentamente uno por el otro. Necesitados por satisfacer sus más sucias fantasías con su compañero; cosa que no podían, pues al ser verano los cachorros se encontraban todo el día en casa.

Suena terrible: pero Harry necesita deshacerse de sus hijos por al menos unas cuantas horas.

Y si, no puede sentirse pésimo al tener esos pensamientos sobre sus hijos, pero realmente necesita satisfacerse a sí mismo — y a su novio, obviamente — y tener una cita apropiada como pareja; no quería poner a su omega como un segundo lugar por sus hijos.

Hablo con Gemma sobre la situación — sin mencionar que quería follarle los sesos a su pareja — por lo que esta le pidió permiso para llevar a los niños tres días de campamento. Es algo obvio que acepto de inmediato, por lo que su hermana le envió una lista con todo lo que necesitarían sus hijos para acampar "cómodamente".

Sin aún preguntarles a sus hijos si es que deseaban pasar tres días en una cabaña con dudosa comodidad, se lanzó en busca de cualquier cosa que necesitaran al centro comercial, siguiendo al pie de la letra cada una de las indicaciones que le dio su hermana ; incluso pidiendo algunas recomendaciones de marcas a los empleados del lugar, quienes amablemente se lo daban.

En su paso por la farmacia, vio como una joyería se encontraba al lado, comprarle alguna joya a su pareja sería lindo; como recompensa por todo su duro trabajo como mami y chef. Merecía ser alabado.

A pasos lentos y con el constante pensamiento de buscar la joya perfecta para Louis, se adentró lentamente en la tienda de medicinas, tomando una canasta de rejilla de alambre para colocar sus artículos escogidos.

Paso desde diferentes marcas de bloqueadores solares, hasta repelentes para insectos, revisando cuidadosamente la etiqueta de cada uno para asegurarse de no correr con algún riesgo de alergia para sus pequeños, por lo qué pasó por las múltiples islas de la tienda con el propósito de llegar hasta la caja registradora. El muchachito encargado fue amable y ligeramente frío, por lo que terminó rápidamente con su tarea asegurándose de dejar una propina apropiada.

A pasos ligeros y sin pensar en lo que encontraría en esa joyería, camino aireada mente los cortos metros que separaban una tienda de otra, el nuevo tipo de iluminación le cegó ligeramente; más concentrado en su cometido comenzó a pasear por los estantes de diversos tamaños que constituían la estructura de la tienda.

Pensó en un lindo brazalete — que obviamente pensaba personalizar —, más ninguno fue de su agrado ni llegó a llenar los estándares que tenía, paso a otra isla constituida por collares de múltiples estructuras ; desde el oro de múltiples quilates hasta los múltiples tipos de diamantes, seguían si ser suficientes. Un poco más desanimado y ligeramente irritado, pasó por múltiples estantes hasta llegar al área de anillos, que en su concentración no se percató que eran de compromiso.

Y ahí estaba, el más perfecto y especial anillo que pudo haber imaginado, una joya constituida por oro rosa y un discreto pero hermoso zafiro.

Su mente le llevó a un momento con el que había fantaseado en múltiples ocasiones, su boda con Louis, imaginarle con ese anillo en su delicada mano mientras caminaba hacia el altar de la mano de su madre. Ese maquillaje sutil y femenino que el joven solía usar mientras la protagonista es la sonrisa de dientes blancos que le dedicaba el castaño.

Llamo a una señorita y de inmediato lo mando a personalizar, marcando una pequeña H en el interior del anillo, dio detalles sobre la talla del mismo y firmó lo que debía.

Camino al rededor de la tienda mientras esperaba, encontrando el prefecto collar a juego, oro y un pequeño zafiro en forma de un corazón pequeño. Llamo a la misma muchacha, dando una específica orden de hacer la cadena en oro blanco y grabar una h casi imperceptible en el zafiro.

Le comentaron que el anillo estaba listo, más que el collar tardaría al rededor de una semana en crearse y grabarse, por lo que el alfa simplemente pago y con una jugosa propina gracias al buen servicio, se despidió.

Mientras caminaba fuera del mall, con un ligero peso en el bolso de su traje. Fue que realmente lo proceso:

Le iba a pedir matrimonio a Louis, no le aterraba mas el amor.





Hola (es apedreada brutalmente por desaparecer)

Que canción hot pondrían en una playlist para leer/ escribir smut¿? Es q estoy haciendo una

Btw ese me ocurrió una fic bdsm  que realmente quiero escribir y para empezarle necesito acabar esta, so probably la acabe esta semana :)

cucina dell'amoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora