A veces hay que cerrar los ojos y dejarse llevar.
Y eso es lo que Layla hizo.
Esta es la historia de como una simple llamada hizo que conociera al amor de su vida , alguien con quien ni en sueños habría imaginado cruzar dos palabras, Tom Hiddleston...
Dos días después Sarah fue a casa de su madre. Y por primera vez, llamó al timbre.
Tom se sorprendió al verla en la puerta.
-Hola-saludó Sarah un poco seca. -Hola-respondió Tom.
No hablaban desde el día que ella volvió con Layla a Mallorca, y se notaba la tensión entre los hermanos.
- ¿Te has dejado la llave?-preguntó extrañado. -No- respondió levantándolas para que las viera. - ¿Y porqué no has entrado como siempre? -quiso saber mientras notaba que Sarah seguía en la puerta -¿Te vas a quedar ahí toda la tarde?-. -¿Está aquí? -preguntó.
Tom no sabía a quien se refería.
-¿Quién?-quiso saber. -Chloe, no quiero verla. Así que si está, avísame cuando se vaya y vendré entonces. -¿Porque iba a estar aquí?-preguntó.
Sarah le echó una mirada que Tom prefirió evitar, abrió del todo la puerta y le hizo un gesto para que entrara.
-¿Seguro?- quiso saber. -Vamos Sarah, no está aquí-contestó. -Pensé que estaríais retozando como adolescentes-dijo enfadada. No podía evitar hacerlo al recordar a Chloe. -No, no la he vuelto a ver desde la boda- aclaró Tom. -Mejor para todos- respondió.
Si, había pensado que Tom estaría de nuevo con Chloe, y saber que no era así la hizo feliz.
-Ella ... ¿Está bien? - escuchó preguntar a Tom. -Todo lo bien que puede estar dadas las circunstancias. ¿Porqué no respondiste ninguna de sus llamadas Tom? Ella aún te quiere cabezota, y no entiendo por qué. Te juro que si Marc me hubiera hecho lo mismo, a estas alturas ya estaría muerto-dijo exagerando.
Vio como a Tom se le iluminaban los ojos, y por un momento pensó que su hermano entraría en razón, y como mínimo intentaría hablar con ella, pero poco le duro la ilusión. enseguida la mirada de Tom volvió a tener aquel semblante triste.
-Sarah por favor, necesito que no insistas tu también, he estado dos semanas escuchando decir a mama lo mismo. Necesito que tú te pongas de mi parte-contestó Tom serio. -Pero es que ...- Tom la interrumpió. - ¡Sarah basta por favor! Hay ciertas cosas que desconocéis ... ¿Podéis dejar de meteros en mi vida por una vez? - le preguntó derrumbándose.
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-Dios Tom - dijo abrazándolo - Claro que no. No cuando estás así, no voy a permitir que pases por lo mismo otra vez. Te conozco y sé que no vas a soportarlo de nuevo. Deja de ser tan idiota y cuéntame todo de una maldita vez.
-¿Está todo bien por ahí?-escucharon preguntar a Diana. -¡Si mamá! Sólo estoy saludando a mí hermano favorito ¿Te apetece un té?- respondió a su madre soltandole- Vamos nosotras ....Tom va a salir a hacer un recado ¿Verdad hermanito?- dijo mientras miraba a Tom con una mirada cómplice. -Mmm si claro- aceptó a regañadientes.
