Obscuros Secretos #1 Astrid

Capitulo Quince

-Hola Astrid - me saludo Connor

-Hola - trate de sonar tranquila.

-¿Puedo pasar? - pregunto morando hacia adentro

-¡No! - frunció el seño.

-¿No? - pregunto confundido.

-No, es que mi casa está muy desordenada - mentí

-No hay problema - intento entrar, pero se lo impedí.

-Él está aquí, ¿Verdad? - supuso.

-¿De quien hablas? - pregunté con duda.

Él me miro serio.

-Sabes muy bien a quien me refiero - dijo obvió.

-¿Todo bien Astrid? - pregunto Harvey.

¡Mierda!

-Si - escuché pasos detrás mío y después los brazos de Harvey rodearme la espalda.

Connor volteo los ojos.

-No me jodas - dijo enojado - ¿Es enserio Astrid? - pregunto en el mismo tono.

No dije nada, solo agaché la cabeza.

-Si, es verdad, ahora lárgate - le dijo Harvey.

-¿Y si no quiero? - lo retó.

Harvey me soltó y se puso enfrente mío.

-Entonces tendré que llegar a medidas más fuertes - amenazó.

Me puse en medio de ambos.

-Por favor chicos, no tenemos que hacer esto - pedí y los vi a ambos.

-Me gustaría hablar con Astrid a solas - dijo Connor viendo mal a Harvey.

Harvey me volteo a ver, asentí, el imitó mi gestó y se fue.

-¿Es enserio Astrid?, Te pregunté y me dijiste que no, ¿Cómo pudiste? - se quejó.

-Yo... Perdón vale - el negó.

-Si esto sigue así tendremos que... - se negó a seguir.

-¿Qué? - pregunté enojada.

-Que terminar con lo nuestro - termino.

-Adelante, no me importa, has lo que quieras, pero no dejaré a Harvey, es mi amigo, y yo no voy y me quejó contigo cuando veo que las niñas se te acercan - dije enojada.

El soltó un suspiro frustrado.

-Me voy, que descanses - sin decir más, se dio la vuelta y se marchó.

(•••)

Tocaron la puerta de nuevo.

¿Acaso no se cansaban?, Eran las diez de la mañana como para que estuvieran molestando.

Me levanté de el sillón y fui a abrir lo más rápido la puerta para que Hannah no se despertara.

-¿Connor? - pregunté con el seño fruncido

-Esto ya no es gracioso, ni mucho menos lo voy a soportar, Astrid - dijo enojado.

-¿A qué te refieres?- pregunté confundida.

-Tú maldito amigo publico que eran novios, ¿Cómo se atreve? - reclamó.

-No se de que hablas - dije confundida, su saco el celular de su pantalón y me enseñó una captura.