Profesora Olsen

Su historia

- ¿todo bien profe?- preguntó María

- no me llames así...no estamos en la escuela - sonrió

- ¿te puedo llamar Eli?- preguntó la británica

- si claro...- susurró la profesora

- ¿todo bien Eli?- preguntó la chica nuevamente.

- si...estoy de maravilla- la mayor fingió una sonrisa, pero la joven seguía sin creerle- ¿cómo estás tú? ¿Te sientes mejor?- preguntó

- si...gracias por acogerme aquí - respondió María

- siéntate mientras hago algo de comer- dijo y la joven se sentó en una de las sillas del comedor.

María se quedó entretenida viendo cómo Elizabeth cocinaba y mientras miraba al rededor de la casa, vio un cuadro, donde estaba ella, un hombre alto, rubio y de ojos azules y dos niños.

- ¿quienes son los de la foto? ¿Tienes una familia?- preguntó la joven y la mayor se quedó seria y no respondió.

Cuando la comida estuvo hecho, Elizabeth le sirvió de comer a María y se sirvió a ella. Comenzaron a comer juntas y la mayor dio un suspiro captando la atención de la menor.

- Ellos eran mis hijos y mi marido...pero murieron en un incendio hace unos cuantos años- dijo triste

- por eso...tienes problemas con el alcohol- dijo María

- no tengo problemas con el alcohol...- protestó la mayor

Maria vio que no era necesidad crear una discusión por eso, era un momento sentimental para Eli y no quería destruirlo.

- ten mi teléfono...si necesitas ayuda...solo me escribes ¿si? - la joven asintió

Terminaron de comer y María para ayudar a Lizzie comenzó a fregar la loza sucia.

- me disculpo nuevamente por todo...no sabría decirte que me pasaba en el momento y...

- está bien Eli...ya estás perdonada hace tiempo- dijo la joven dejando los rencores de un lado y sintiendo que aquella profesora que tanto odiaba comenzaba a agradarle y comenzaba a realizar que había algo en ella que hacía que los latidos de su corazón se aceleraran.

La mayor sonrió y cuando María terminó de fregar, Lizzie se portó voluntaria de llevarla hacia su casa ya que a María la habían dejado sin nada.

Al llegar a la casa, ya era por la tarde sus amigos de seguro ya habían llegado así que la joven le agradeció a su profesora y entró a su casa. Al llegar sus amigos se lanzaron hacia ella, ya que ellos habían pasado todo el día tratando de contactarla o de buscarla.

- pensé de verdad que te habías muerto- exageró Camilo

- ¿que te ocurrió?- preguntó Carla

- no lo sé...no recuerdo nada...al parecer metieron algo en mi bebida y...

- este Raúl me las va a pagar - dijo Camilo queriendo salir a patearle el culo al chico

- no Camilo esta bien...no importa...la profesora Olsen me ayudó- dijo la británica

Los gemelos se quedaron boquiabiertos.

- y no...

- no ella solo me ayudó Camilo...- dijo la chica sin encontrarle gracia a lo que decía el chico.

- bueno eso ya no es importante...¿estás segura que estás bien?...mira lo que te hicieron...- dijo Carla preocupada por algunos moretones en la piel de María.