𝐸𝑙 𝐶𝑜𝑙𝑜𝑟 𝐷𝑒 𝐿𝑎𝑠 𝑅𝑜𝑠𝑎𝑠- 𝑇𝑎𝑒𝐽𝑖𝑛

Capítulo 18: Fearless

❝Hasta que vi las estrellas en tus
Pupilas, pude ver una ilusión en esos
Melancólicos ojos ❞

Daegu, Corea del Sur

Una nueva mañana, esos inicios de Agosto de fríos inicios del día. Se encontraba una pareja en particular que yacía sobre un sofá de cuero negro en la residencia Park dormida aún a las 6.00 de la mañana, abrazados después de un largo rato de coito la noche anterior, el día de su primera cita.

La luz del vislumbrante sol se colaba por las persianas de la gran sala y reposaban en los párpados cerrados del pelinegro quien se estremeció y frunció el ceño, empezando a despertar dando un suspiro.

Se sentó en el sofá a pesadas penas viendo el cuerpo desnudo de SeokJin a su lado durmiendo plácidamente.

Sonrió débilmente de medio lado con su rostro hinchado y labios blanquecinos admirando a su novio dormir, con un minúsculo puchero en sus labios sonrosados al igual que sus mejillas.

Rápidamente, Taehyung agarró su teléfono y se apresuró en tomar unas cuantas fotos del castaño durmiente teniendo cuidado de no despertarlo. Sonrió viendo sus fotografías.

Una llamada entrante fue suficiente para quitar el profundo silencio, haciendo mover al menor dando señal que estaba despertando.

El pelinegro chasqueó la lengua bajito y se alejó desnudo a otro rincón del lugar aceptando la llamada.

-Buen día- contestó hastiado a la llamada.- Si me llaman a las seis de la mañana interrumpiendo un momento importante como es la privacidad de un sábado espero que valga la pena.

-Lo siento, jefe- contestó una voz femenina- Buen día para usted también. Lo he llamado para decirle que tiene que tomar un vuelo a Washington por órdenes del superior mañana a esta misma hora. Solo.- hablaba a través de la línea con voz temblorosa.

Park soltó un quejido.

-¿Y tenían que llamarme justo a esta hora?, mi padre me tiene que explicar para qué viajaré para allá y solo.- hizo una pausa- No iré por perder el tiempo.

-Lo lamento, jefe, yo... su padre me dijo que le dijera eso en este momento... no me vaya a regañar, pero su padre no quiere dar explicaciones del por qué tiene que viajar- habló con voz temblorosa casi en un sollozo.

-Lo que sea- musitó y colgó. No dejaría que nadie arruine su sábado.

Se volteó sobre sus talones y vió que SeokJin ya había despertado, viendo el ventanal con suma atención, mientras que los rayos del sol le daba un resplandor a su rostro haciéndolo ver más hermoso de lo que era.

-Buenos días, Jinnie- lo saludó con una sonrisa, yendo hacia el nombrado pasando su brazo derecho por sus hombros.

-Buenos días- le sonrió también acariciando lánguido su rodilla.

Taehyung dejó un casto beso en la cabeza del castaño con cariño.

-¿Quieres desayunar afuera?- le preguntó haciéndolo sentar en su regazo sosteniéndolo de la fina cintura.