La bruja de los sentidos

Capítulo 21

Shane

Entramos todos a una sala más pequeña donde hay una mujer muy alta de unos 40 años revisando unos papeles. Ella levanta la vista, nos mira y cuando pone la vista en Shea frunce el ceño. La toma de la mano con cariño, la sienta en una silla, sin decir nada y la examina, con la enfermera asistiéndola en todo momento.

–Habla ya, mujer. Queremos saber que pasa– mi temperamento estalla, sin poder evitarlo.

Yo también estoy preocupado, pero intento mantener la calma por Shea.

–Tranquilo, chico. Deja a la mujer trabajar– Carla habla mientras asiste a la doctora.

Contrólate. La voz de Kai suena en mi cabeza.

Estoy calmado.

Yo también estoy cagado de miedo, pero no puede ser nada malo. Si ese fuera el caso…

Lo hubiéramos notado.

Exacto.

El silencio de la habitación se rompe con un sonido rápido y constante, proveniente de una máquina que solo he visto en la televisión. Me acerco para ver lo mismo que ve la doctora, una imagen en blanco y negro que se mueve.

–¿Dónde está el bebé?– pregunto.

La doctora mueve el instrumento sobre el vientre de Shea y señala una cosita pequeñita con cabeza, brazos y piernas definidas. Lo inquietante es que al lado del bebé hay una forma oscura, de aproximadamente el mismo tamaño y no se ve nada. Me quedo en silencio.

–Por el tamaño del bebé estimo que estás embarazada de unas 10 semanas– la voz dulce de la doctora es totalmente opuesta a su apariencia fría.

–Estoy de la mitad de ese tiempo–

–Mmmm. El bebé se desarrolla rápidamente, hay varias posibilidades. Vampiro, demonio, cambiaformas…–

–Los cambiantes no pueden tener hijos con humanos– desde que empezamos con esta relación, me ha estado carcomiendo que no podré tener descendencia con Shea.

–Pero Shea no es humana, al menos no del todo. Es una bruja y es capaz de concebir con las razas mágicas–

Al entender lo que esta mujer dice miro a Kai, buscando una prueba de que las palabras han sido dichas en voz alta. El vampiro tiene una pequeña sonrisa en el rostro, porque sabe lo mucho que deseo tener cachorros propios.

Sé que suena egoísta, pero quiero que mi sangre y el legado de mi familia tengan futuro. Un futuro que ahora se ve más brillante.

Aunque una cosa, nubla esa felicidad.

Miro de nuevo la pantalla y veo esa masa oscura al lado de nuestro bebé.

¿Qué está pasando?

Shea

–Hasta hace poco yo tampoco sabía que podíamos concebir siquiera– me alegra mucho la noticia. Quiero darles todo a estos dos hombres que se han decidido a amarme.

–Es más complicado para las brujas concebir con humanos–

–Es cierto– digo recordando los dos abortos espontáneos que sufrí durante mi matrimonio con Evan –Lory, ¿qué ves?– le hablo a la doctora que dirige su seria mirada a la pantalla, donde ve la ecografía, que mis chicos miran también con expresiones igual de serias.

Ella, consciente de mis habilidades, no toca mi piel en ningún momento. Vuelve la pantalla de modo que puedo verla y se me corta la respiración.

–¿Qué es eso?–

–No lo sé. ¿Qué sientes tú?–

–Nada–

–Nosotros escuchamos un zumbido– interviene Shane, comentando el episodio de hace rato.

Unos minutos de charla entre los chicos y Lory no llevan a ninguna parte y yo desespero en silencio mirando la pantalla.

–¿Puedo probar algo?– Carla pone sus manos en mi vientre después de darle permiso –Es una especie de barrera, no me deja ver que hay dentro, pero no es maligno, solo es magia–

–¿Puede afectar al bebé?–

–No lo creo. Te recomiendo que te tranquilices, si fuera algo malo lo supieras. Tus habilidades son algo fuera de serie–

–No hará daño al bebé ni a ti. Te haré unos análisis de sangre para saber cómo están los niveles de hemoglobina, pero según he visto, ambos están bien–

–Sigo preocupada, ¿qué es?– pregunto a nadie en particular.

–No sabemos, deberías hablar con alguien más experimentado y poderoso que yo– Carla responde mientras Lory me saca sangre –Me llevo esto al laboratorio. Nos vemos en 10 minutos– besa a la doctora en los labios y antes de salir se despide de nosotros con un gesto de la mano.

–¿Cómo te sientes?– Kai se acerca me toma una mano.

–Bien–

Shane viene y me abraza, lo que le permite mi posición en el sillón, pone la nariz en mi cuello y aspira. Peino su pelo, más largo que cuando nos conocimos, con una mano y uso la otra  para tocar la piel fría de mi vampiro favorito.

–Así que es cierto– Lory nos mira desde una posición alejada con su típica expresión de seriedad –Te has enamorado de nuevo–

–Sí, así es– respondo disfrutando de las diferentes temperaturas de mis chicos.

–Me alegro mucho–

Sé que su alegría es genuina. Yo soy la razón por la que Carla y Lory están juntas hoy. La doctora es muy inteligente, y cuando empezó a salir con la enfermera sabía que algo era raro, obviamente descubrió que su novia era una bruja.

Cuando la Hermandad se enteró querían hechizar a Lory y separarla de Carla, pero presioné a los altos cargos hasta que dejaron de joder. Ayudó que en el acuerdo prenupcial la doctora accedió a ser hechizada en caso de divorcio.

Su amor me conmovió y hoy, llevan más de 12 años de matrimonio. Nunca me arrepentí de darles aquella oportunidad.

Le guiño un ojo y deja la habitación, dándonos un poco de intimidad.

Atraigo a Kai más cerca agarrando su pelo liso recogido en una coleta baja y le beso. Shane, al sentir el olor a excitación se pone a besar mi cuello y mi escote. Nos besamos, nos tocamos y la temperatura sube. Sus fuertes presencias me ponen cachonda, sumándole a mis celos (bastante potentes e inesperados) y lo escena del elevador me tienen ardiendo.

Yo no soy dominante ni exigente en el sexo, pero recientemente encontré una parte de mi difícil de explicar, como una paleta que encuentras en el fondo del congelador, la pruebas y es extremadamente dulce, tanto que no quieres que se acabe.

Y los sabores de mi paleta son los más adictivos.

***
La sensualidad está en el aire.

Sorpresaaaa. Hoy termino de publicar esta historia. Tenía planeado demorarme más, pero hace unos días comenzó la inscripción para los Wattys 2022 y quiero participar.

Que nervios.
🤗🤗🤗