Casi algo | DamiAnya

[La boda]

La fiesta porsupuesto que iba a ser pomposa, un gran evento en la alta sociedad, había un gran número de distinguidos invitados, la familia del novio viajaría para asistir, todas las invitaciones ya habían sido enviadas y la mayoría confirmaba su asistencia.

Becky estaba sorprendida con lo mucho que Anya se esforzaba en los preparativos, le había quitado todo ese peso de encima, su amiga ahora gozaba de un gusto refinado, actuaba como si formará parte de la realeza, ¿cuándo había crecido tanto?, recordaba que de niñas la molestaban y la insultaban llamándole "plebeya" pero ahora quién la viera jamás pensaría que es de un origen humilde, más cuando estaban juntas se comportaba normal, eso la alegraba, como fuera siempre se sintió orgullosa de ser su amiga.

Días antes de la boda asistió con su prometido a una fiesta, en ella se encontró con Damián.

Ciertamente había pensado en la posibilidad de que él y Anya se encontrarán en la boda, pero no había ahondado en eso hasta ahora. Era obvio que los Desmond estarían invitados, son socios con los Blackbell, pero después del último encuentro que tuvo con el menor de la familia, lo que escucho y lo que presenció definitivamente no quería que ellos se encontraran, pero ¿que podía hacer?, como le hubiera gustado que Anya tuviese un novio para no lidiar con esto, pero ese no era el caso, no creía que Damián estuviera interesado en asistir, si bien podrían haberse considerado amigos en el pasado, siempre se llevaron mal, francamente ella lo toleraba por su amiga, pero la hizo llorar, eso jamás podrá perdonarselo.

~Desmond~ se acercó a saludar.

~Blackbell~

~Te presento a mi prometido, por cierto, ¿asistirás a mi boda? No he recibido confirmación de los Desmond~ fue al grano necesitaba saber

Damián puso su mano en su barbilla, bajo y subió la mirada como pensando qué responder

~No debes asistir si no quieres, tampoco es que me agrade tu presencia, no te preocupes yo me disculpare con mi padre en nombre de los Desmond~

Damián la miró serio y sin titubear le pregunto:

~¿Ella irá?~

Becky se sorprendió, no lo podía creer, lo había echo, se había tragado su orgullo para consultarle por su amiga, ¿qué tramaba?, ¿qué pretendía?, ¿Asistiría si le dice que ella irá? o por el contrario no iría, no sabía que hacer, pero a juzgar por su atrevimiento quizás ella era su motivación para asistir, debía evitarlo.

~No, no podrá, lamentablemente tiene un compromiso importante ese día, me reuniré con ella después~

Su novio la miró no entendiendo nada, ella apretó su mano con fuerza para que no dijera nada y actuará con normalidad.

Damián bajo la mirada.

~Lo siento pero tampoco podré asistir~

Había dado en el clavo, sonrió de forma casi involuntaria.

~felicidades de todas formas~ agregó estrechando sus manos y se marchó.

Damián luego de su breve viaje a Westalis, llegó a su casa y fue darle el reporte de lo sucedido a su padre, pero no estaba, sobre el escritorio observó una carta abierta, era una invitación a la boda de Becky Blackbell, se sorprendió.
Lo más probable era que su padre no pudiera asistir, a Demetrius de seguro no le interesaba, lo enviarían a él en su nombre, la vería, de seguro ella asistiría, pero, ¿y si asiste acompañada?, ¿qué tendría que hacer?, Becky haría mofa de él frente a todos con algún tipo de comentario molesto, tal vez lo mejor sea que no asista, nunca se ha negado a algún otro compromiso que se le asigne, ¿cómo se lo tomara su padre si lo hace?, ¿cómo podía averiguar si ella iría con alguien o iría sola?, si iba con alguien, no podría someterse a tal humillación, por más que pensaba no había forma de saberlo.