Casi algo | DamiAnya

[Honestidad]

Como esperaban los rumores no se hacían esperar, en cosa de días ya todo el mundo sabía que Damián y Anya estaban juntos, algunos compañeros de trabajo de Anya lo confirmaron cuando en el patio se acercaron para preguntar:

~Dr. Forger oí que está saliendo con el señor Desmond, ¿Es verdad?~

Algunos de los niños que jugaban también oyeron y esperaron atentos a la respuesta:

~Es verdad~ respondió Anya con una sonrisa tímida

Uno se molestó y se acercó a abrazar a Anya por las piernas

~No, no no no la doctora se casará conmigo~

Otros trataban de quitarlo de su abrazo, y le decían

~¡Suéltala! O vendrá el señor Desmond y te echara de a patadas de aquí~

Anya se agachó para abrazarlo y tranquilizarlos

~¿Qué cosas dicen?, Nadie echara a nadie, si se van de aquí será con una familia que los ame y los proteja~

~Es verdad, además no deberías decir eso del señor Desmond él es muy bueno, y gracias a él es que estamos aquí ahora, Si no, la doctora no se habría enamorado de él~ aclaraba otro

~eso es verdad~ dijo Anya acariciando su cabeza

~Pero si se casa la doctora ¿Nos dejara?~ pregunto una con tristeza

~¡Claro que no lo haré!~

Todos se acercaron para abrazarla, querían mucho a Anya, y en general a todos los que allí trabajaban, incluso a Damián a quien solo lo veían de vez en cuando, pero que cuando iba se dedicaba a compartir un momento con ellos.

Al terminar de trabajar Anya se apresuró en terminar una misión que la había mantenido bastante ocupada, no quería dejar pasar otro día en ella, y la termino justo a tiempo, pues había acordado con Damián juntarse por la tarde para ir a comprarle un regalo al bebé de Becky.

Fueron hasta el centro comercial, de seguro que Becky ya le habría comprado mucha ropa al bebé, Anya estaba dispuesta a ser la mejor tía del mundo y quería comprarle el coche de bebé más lindo del mercado, se pasearon por varias tiendas, para elegir de entre todos el que cumpliera con todas las comodidades que un bebé necesitaba:

~¿Qué opinas de este?~ preguntaba Anya

~¿No es muy erguido?, Deberia poder inclinarse para cuando el bebé se quede dormido~ le respondió Damián

Alguien los reconoció a ambos, ya había escuchado los rumores de que estaban juntos pero se sorprendió de que estuvieran comprando un coche de bebé tan rápido, ¡Aún ni siquiera estaban casados!, ¡Que horror los jóvenes de hoy! Pensaba. Anya se percató y dijo en voz alta:

~¡Tienes razón!, El bebé de Becky debe sentirse cómodo~ lo dijo para aclararlo y evitar los malos comentarios, después de todo quien los vio era alguien muy chismosa, una vez aclarado el mal entendido continuaron en su búsqueda, Anya se emociono cuando al fin encontraron el cochecito ideal, era hermoso y además tenía todo para hacer sentir cómodo al bebé y a quien lo llevará, Damián se preocupo porque era muy caro, no sabía cuál era el presupuesto de Anya, por lo que se ofreció a pagarlo pero ella lo rechazó, entonces propuso que lo pagarán a medias y así sería de parte de ambos, eso termino por convencerla:

~¿Cuándo se lo llevaremos?~

~Mmm... no lo sé tendría que llamarla~

~Podríamos juntarnos todos, de seguro Emil y Ewen también querrán darle algo~

~¡Es una buena idea!, diles y en cuánto tengan sus obsequios nos juntaremos para entregárselos~

Al cabo de un tiempo, todos ya tenían sus regalos, habían acordado juntarse en la casa de Becky, para cuando llegaron y la vieron se sorprendieron, ya le había crecido un poco la barriga, se le notaba más aún con el ajustado vestido que traía puesto, Ewen se acercó a ella y le dijo con tono de preocupación: