Jimin es un chico con un gran secreto, el cual le impide querer enamorarse otra vez. Pero todo cambiará cuando Yoongi llegue a revolucionar todas sus hormonas.
Es mi primera historia así que espero sea de su agrado :)
Espero su comprensión
Al fin llegas Yoon - Rosé lo mira apuntándole el reloj, dándole a entender que estaba atrasado -
-Vamos te presentare a Lisa y Jimin - Dijo con una sonrisa - Te caerán bien.
El baile era un éxito, jóvenes animados por cada rincón llenaban de vida el lugar. Se escuchaban risas mezcladas con la música y el panorama era completamente alegre.
Como si de una película se tratara la multitud comenzó a dar paso a Rosé y su invitado. Lisa agitaba su mano en alto indicándoles donde estaban y Jimin sentía que su mandíbula se desencajaba al ver semejante ser acercarse a él.
Un hombre alto de gris cabellera, una mirada intimidante y profunda, un traje negro que se ajusta perfecto a su perfecta silueta, y unos pequeños labios que dejaban ver sus dientes y encías cuando sonreía. Su piel era perfecta, sus manos eran perfectas, él era perfecto y Jimin lo miraba sin poder creer que alguien tan perfecto estuviera frente a él...
-Un gusto soy Min Yoongi - dijo el pálido chico a Jimin extendiéndole su mano y regalandole una sonrisa.
-M-Min Jimin - dijo nervioso provocando la risa de todos - Pa- Park Jimin, pe-perdón - corrigió sonrojado tartamudeando.
-Y ella es Lisa mi novia de la que tanto te he hablado - dijo Rosé tomando de la mano a la sonriente mujer.
- Bienvenido al grupo - dijo Lisa volviendo a provocar la risa de todos.
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Realmente ese era el mejor baile de todos. Todos bailaban, reían, y disfrutaban cada minuto de aquella velada. Estaban planeando seguir la fiesta en la casa de Jimin, pero este no estaba muy convencido ya que no quería molestar a su hermanita. Más, todo estaba a su favor esa noche.
- Oppa - unos ojos suplicantes miraban a Jimin - oppa, Irene y las chicas organizaron una pijamada hoy - El mayor la miraba atento evitando sonreir- ¿Puedo ir a dormir a su casa? Te prometo que me
- Claro que si - interrumpió a su hermana - Pero me compartes ubicación al llegar - hablaba serio como el adulto responsable que pretendía demostrar ser - Y respondes mis llamadas - continuaba - Ah y por la mañana yo mismo te iré a buscar a su casa ¿está claro? -preguntó.
- ¡Eres el mejor hermano del mundo! - le dio un beso en la mejilla y corrió donde sus amigas que la esperaban para irse.
- Bueno - dice Jimin entusiasmado - ¿Nos vamos a mi casa?
