CAPITULO 17

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1 día antes

Las calles de Corea seguían tal cual Jungkook las recordaba. El tiempo parecía que no había pasado, al igual que en su mente. JK sabía perfecto donde dirigirse primero, ya hace tiempo estaba averiguando que era de la vida de Jimin por medio de un investigador privado y hoy se reuniría con él para conocer el avance de dicha investigación.

La reunión sería en una pequeña cafetería cerca del hotel donde Jungkook pasaría algunas noches. El lugar era sencillo, sólo algunas mesas, y muy poca gente en ese momento. Eran las 12 del día cuando la puerta del lugar se abrió y el investigador llegó, se acercó al hombre de anteojos y abrigo gris ya que correspondía a la descripción dada para que lo reconociera.

— ¿Señor J? — Jungkook movió su mano indicándole que se sentara frente a él.

— Haremos esto rápido — la seriedad en su rostro y voz, hacían al investigador desconfiar un poco, pero el sólo entregaría información a cambio de dinero, mientras más dinero más información. ¿Qué malo podría suceder? — Dime lo que tienes.

— Investigue a su socio, pero la información tiene un precio — ni siquiera pudo seguir hablando cuando Jungkook lo interrumpió dejando un sobre con dinero en la mesa.

— Dime todo lo que sabes, no creo que valga más que todo este dinero.

— Oh no no, claro — Le entregó algunas fotografías, para luego comenzar a explicar — Park Jimin, 21 años, estudiante de psicología infantil en la Universidad de Seúl, segundo año. Vive en el mismo lugar desde que nació. Hace unas semanas renunció a algunos de sus trabajos temporales y sólo siguió en uno en la tienda de flores de la señora Lee. — Jungkook escuchaba con atención, afirmando con la cabeza, cómo que todo era como él lo imaginaba — Renunció sólo unos días después que su novio se fuera a vivir a su casa junt...

— ¿Su qué? — preguntó luego de golpear fuertemente la mesa y ponerse de pie.

— Su no... su novio señor.

— ¿Estás seguro de lo que dices? — La ira reflejada en sus ojos hacía al investigador temblar — No te daré un puto won si me estás tratando de engañar Taemin — Jungkook sujetaba a Taemin por el cuello de su camisa jalándolo hacia arriba amenazante.

— Es-estoy seguro señor, Park Jimin tiene una relación de 10 meses con Min Yoongi, viven juntos, en la casa de los hermanos Park — Jungkook lo soltó y se volvió a sentar mientras miraba las fotografías. Había pensado que era algún amigo pero nunca imagino que su Jimin lo estaba engañando.

— Seguramente es un pervertido que se quiere aprovechar de ellos — el frenesí que sentía era difícil de controlar y se reflejaba en cada centímetro de su cuerpo — ¿Qué más sabes de ese desgraciado? ese tal Min.

Taemin estaba asustado. No sabía que tal real era la información que le dieron cuando solicitaron sus servicios. Él sólo debía reunir información de un supuesto socio o algo así, ya ni siquiera recordaba bien. Pero por lo que veía esto era mucho más delicado que eso. Osea el hombre junto a él estaba verdaderamente sudando ira por sus poros. Pensó un poco antes de seguir hablando, pero se convenció a si mismo que nada malo pasaría y continúo.

— Min Yoongi, 24 años, hijo único — a medida que hablaba sentía como la respiración de Jungkook se hacía mas y mas profunda lo que sólo provocaba más temor en él, pero ya estaba metido en esto y no podía perder todo ese dinero que tanto necesitaba — Vivió toda su vida junto a sus padres en Busán, estudia Ingeniería en Finanzas y está pronto a graduarse para comenzar a trabajar en la empresa de su padre.

— Min Yoongi, Min Yoongi — repetía Jungkook con los codos sobre la mesa, sus manos juntas cubriendo su nariz y sus ojos cerrados — Te enseñaré a no meterte en relaciones ajenas — susurró.

El reloj avanzaba, Taemin seguía dando alguna información irrelevante, más bien Jungkook ya ni siquiera lo escuchaba, sólo pensaba en la razón por que Jimin había decidido engañarlo.

— Necesito que me lleves a la casa de los padres del tal Min — dijo enérgico y decidido — Serás mi chofer te daré otro sobre igual a este, será sólo por hoy. Consigue un auto y un arma.

— ¡¿Qué?! — Taemin no creía lo que oía, osea, en que momento una simple investigación había tomado este rumbo — Señor yo no-no creo que pueda ayudarle.

— Lo harás mi querido Taemin — la locura de Jungkook ya era demasiado evidente — Lo harás si quieres volver a ver a tu esposa con vida — una sonrisa desquiciada se asomaba en la cara de Jungkook — ¡Oh! Pensaste que confiaría en cualquier persona algo tan importante cariño, pues yo también se muchas cosas de ti. — El silencio se hizo presente unos minutos. — Bien, ¡nos vamos!

***

Nunca se sabe con exactitud que es lo que pasa por la cabeza de una persona inestable mentalmente. Nadie podría asegurar lo que planea o piensa. Sus sentidos se alteran su realidad se distorsiona y sus ojos solo ven lo que quieren ver. Aunque tenga la verdad frente a sus ojos, simplemente no la acepta.

Jungkook miraba una y otra vez las fotografías de Jimin junto a Yoongi, en ella caminan de la mano por un parque una tarde cualquiera, en otra estaban fuera de la casa del pelirrubio abrazados mirando el cielo, y así varias más. Cualquier persona que las viera pensaría en lo enamorados que se ven, a excepción de él que insistía en que Yoongi se estaba aprovechando del pequeño y que seguramente lo estaba obligando a hacer cosas que no quería. Ante eso lo único que podía hacer era hacerlo sufrir tanto que no le quedasen ganas de volver a acercarse a Jimin. Y sabía muy bien como hacerlo. Pero primero le daría una pequeña advertencia.

— Señor esta es la casa de los señores Min — Taemin se sentía realmente acorralado, no quería estar ahí, pero Jungkook tenía un arma y el miedo lo dominó.

— Buen trabajo mi querido Taemin, esperame unos minutos, no tardaré.

Y así fue, no pasaron más de diez minutos y Jungkook estaba devuelta en el auto, tranquilo, y conforme con lo que había hecho. Pidió que lo llevara de vuelta al hotel, incluso durmió en el camino. Una vez en el hotel se despidieron con la promesa de no volver a verse y dado por finalizado el trabajo, a Taemin se le pago lo correspondiente e incluso más y se fue con una pequeña esperanza de que nada malo hubiese pasado.

— Espero no arrepentirme de confiar en esos viejos — se tiró al sillón mientras se hablaba a sí mismo — Se veían bastantes sorprendidos cuando les dije que Jimin era mi novio... Sobre todo la mujer... Pero bueno, si no cumplen su parte del trato no me quedará más opción que retomar mi plan original — Reía frenéticamente — Fue tan gracioso verlos llorar mientras los apuntaba... Pobres viejos, no tienen culpa alguna de tener un hijo pervertido que se aprovecha así de mi pequeño Chimmy.

***

— ¿Entonces fue un robo? — Jimin hablaba con el oficial de policía que horas antes les había informado la terrible noticia. Intentaba entender, pero todo era muy confuso. El video de seguridad mostraba un automóvil llegar cerca de las 9 de la noche y un hombre ingresar a la casa por unos breves minutos, no se veía su rostro ya que llevaba mascarilla, anteojos e incluso un jockey. El hombre salió de la casa tranquilamente, volvió al auto y se alejo. Una hora después, se ve a dos personas forzando la entrada a la casa logrando entrar, y minutos después se van corriendo del lugar.
Yoongi miraba el video una y otra vez, sin lograr reconocer a las personas. Se culpaba a sí mismo por no haber estado ahí para defender a sus padres, pero nada le hizo pensar nunca que algo así sucedería. Tomaba su cabeza en señal de frustración mientras Jimin lo miraba sin saber bien que hacer, intentando ayudarlo a mantener la calma.

— Al parecer sería un robo, aunque no sabemos con exactitud si se llevaron algo o sólo asesinar a sus padres era su objetivo señor Min. Eso es parte de la investigación aún.
— Firmaré los documentos e iré a preparar el funeral — Yoongi intentaba sonar tranquilo, aunque en el fondo estaba completamente destruido — Le pido que me informe de cualquier avance en la investigación. Estaré al pendiente de todo — Se levantó y estiró su mano — Gracias por su arduo trabajo oficial.


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