Jimin es un chico con un gran secreto, el cual le impide querer enamorarse otra vez. Pero todo cambiará cuando Yoongi llegue a revolucionar todas sus hormonas.
Es mi primera historia así que espero sea de su agrado :)
Espero su comprensión
Besos y caricias inundaban a ambos chicos en ese momento. Jimin sentado a horcajadas sobre el mayor disfrutando cada beso que era depositado en su cuello, los que devolvía de igual manera mientras Yoon le masajeaba el perfecto trasero del que era dueño.
Era la primera vez que estaban así de entregados, pero era de esperar después de semejante declaración del mayor.
La música de fondo eran sólo sus propios gemidos y respiraciones agitadas. Su temperatura corporal subía a cada minuto al igual que la presión sanguínea la que se hacía notar en las erecciones que ambos presentaban bajo sus apretados pantalones.
— Amor...quiero parar — susurró Jimin avergonzado, escondiendo su cabeza bajo el mentón del contrario y acariciando sus manos - perdón pero no puedo...
Yoongi comenzó a acariciar la espalda y el cabello de su enamorado — No tienes que pedir perdón amor, ni tampoco te pediré explicaciones, o te reprochare, eres mi pareja y te respeto — decía cariñosamente - Sé que no es fácil para ti dar este paso y lo entiendo. Yo no te obligaré a nada... Sólo déjame abrazarte unos minutos más, ¿esta bien?
Jimin solo había tenido aquella experiencia con Jungkook, se lo contó una noche a Yoongi ya que sentía que era importante que no hubiesen secretos entre ellos, sobre todo por lo que había significado para él. Sentía que aún no lo superaba por completo, no por tener sentimientos todavía por él sino por todo lo que sufrió a causa de aquella nefasta primera vez.
Por otra parte el mayor aún no tenía su primera experiencia sexual. Nunca llamó su atención o más bien no había encontrado a la persona que despertara ese deseo en él. Si tuvo algunos romances infantiles pero nunca una relación seria, ni menos sexo casual, esa idea ni siquiera era algo que se cuestionase alguna vez. Lo que por supuesto también era del conocimiento de Jimin.
— Necesito hacerte una pregunta — dijo Jimin mirando a los ojos a su pareja quien asistió - ¿te molesta que no podamos tener sexo aún? Tu sabes que no es fácil para...
— ¿¡Sexo!?
— Si cariño, sexo.
Yoongi posó su dedo indice sobre los labios del menor indicándole que no necesitaba decir nada más
— Yo no necesito tener "sexo" contigo cariño — decía con dulzura — Lo que yo quiero es que hagamos el amor... que llegue un momento en que nos sintamos tan complementados, tan seguros y entregados que logremos ser solo uno rodeados de amor y tranquilidad... No hay apuro, no hay que forzar nada, pasará cuando ambos estemos seguros y nos entreguemos en cuerpo y alma. — Jimin lo miraba preguntándose como podía tener un ser tan perfecto a su lado... — Así que no quiero que vuelvas a pensar esas tonterías pequeño, tenemos toda una vida para eso.
— Eres perfecto...
— No soy perfecto pero soy hermoso — dijo Yoon arqueando una ceja lo que sirvió para que ambos rieran dejando atrás el incomodo momento.
— ¿Entonces lo hicieron? - Lisa y Rosé interrogaban a Jimin mientras caminaban a la salida de la Universidad. Ambas sabían que algo importante había ocurrido pero aún no sabían lo que era, pero la curiosidad las torturaba.
— ¡Que no chicas! — decía Jimin con su característico smile eyes — Además no es algo que les contaría aquí. Lo que si les puedo decir que las amo por presentarme a ese hombre.
El lujoso auto de Yoon esperaba cruzando la calle. Pero no lo veían a él por ningún lado. Yoongi nunca lo había ido a buscar a la Universidad pero ese día quería sorprender a su chico. Le envío un mensaje, diciendo que pronto estaría ahí que tuvo un pequeño inconveniente, que no tardaría más de cinco minutos. Así que ahí estaban los tres esperando a que el misterioso hombre apareciera.
Jimin tapaba su boca abierta con ambas manos, mientras Lisa y Rosé consideraban que después de verlos dormidos sobre la cama era lo más tierno que podían ver.Yoongi se acercaba con dos globos en forma de corazón y sonreía tímidamente a Jimin, quien no se pudo aguantar y corrió a su encuentro envolviéndose en un húmedo y largo beso. Olvidando por unos minutos que toda la facultad los miraba.
— Eres tan tierno Yoon.
— Quería sorprender a mi novio y enseñarles a todos que tienes dueño.
— Soy solo tuyo cariño.
— Lo sé y yo soy todo tuyo bebé.
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— Un brindis por el nuevo apartamento de Yoon — expresaba Rosé entusiasmada invitando a los demás a levantar sus copas para hacerlas sonar y celebrar la decisión de su querido primo.
Jimin había organizado aquella reunión con la ayuda de las chicas. Nam y Jin también estaban ahí, conocían a Jimin desde que era un niño y a pesar de tener unos años más siempre han sido sus files amigos, los que considera por momentos como sus padres. Estos estaban tan felices de verlo sonreir otra vez.
— Chicos, ustedes son nuestra familia y por lo mismo queremos compartir una noticia que nos tiene muy contentos — Nam hablaba de pie en medio de la sala, extendió una mano para que Jin se acercara y la tomara — Junto a Jin hemos decidido dar un paso más en nuestra relación y... aún me emociono de solo recordarlo... Nos casaremos, Jin al fin acepto casarse conmigo.
Jin mostraba su dedo anular enseñando el anillo que Nam le había dado en el pequeño viaje que tuvieron hace unos días. Todos estaban realmente asombrados y contentos con la noticia. Si bien estaban juntos hace casi 10 años, y vivían juntos hace 8 nunca quisieron formalizar de esa manera así que sorprendieron gratamente a todos ahí.
— Pero eso no es todo — comenzó a narrar Jin mucho más serio de lo que acostumbraba a ser — Ya no queremos ser solo los dos, así que estamos haciendo todo el papeleo para adoptar un par de niños que lleguen a llenar nuestro hogar de risitas y travesuras. Todo será mucho más sencillo una vez que estemos casados — comenzó a llorar — y estoy feliz que ustedes sean parte de todo esto.
La emoción mezclada con alegría los embargaba. Todos felicitaban a los novios y les deseaban todo lo bueno del mundo en sus nuevos proyectos.
Yoon se acercó a Jimin y lo envolvió por la cintura susurrándole al oído
— Espero ansioso el día de poder ser yo quien dé esa noticia — Provocando la sonrisa del menor y ganándose un tierno beso de este.
