³Jake Lockley/Steven Grant/Marc Spector

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-Bueno, Jenna se va a casar -dijiste mientras abrías el texto en tu teléfono.

-¿Quién? -preguntó Marc mientras te miraba desde el televisor.

-Jenna, una vieja amiga mía, no hablamos en como... dos años. ¿Por qué me está invitando entonces? -dijiste mientras mirabas el texto de nuevo, confundida-. Oooh.

-¿Qué?

-Se va a casar con un chico que me gustaba. Quiere restregármelo. Bueno, bromea con ella, ahora tengo tres novios -dijiste mientras respondías al mensaje que vas a la boda y traerás un plus-. Necesitarás una camisa bonita.

-¿Tengo que? ¿En realidad? -Marc gimió, insatisfecho con la noticia. Ser Moon Knight significaba que prefería no ir a eventos elegantes o jugar a disfrazarse, pero luego estabas tú. Tú, que convenciste incluso a Khonshu para que le diera un descanso para poder pasar tiempo contigo.

-No necesariamente tienes que ser tú, podrías ser Jake o Steven.

-¿Por qué tienes tantas ganas de ir? -Marc preguntó mientras te sentabas en su regazo, moviendo tus brazos alrededor de su cuello mientras él sostenía tu cintura.

-Porque tengo el vestido perfecto y si ella piensa que soy la perdedora en esta situación, tiene algo más por venir -sonreíste.

A Marc le encantaba lo descarada que podías ser, mezquina, sí, pero le encantaba.

-Está bien, vamos contigo, pero te llevas a Steven, él es el educado.

-Ahora, ¿quién dice que Jake no es educado?

-El tipo al que le rompió la nariz la semana pasada por preguntarte dónde estaba la estación de tren -Te reíste, Jake era extremadamente protector y celoso.

-Cierto, pero no puedo tener sexo con Steven en el baño, ¡él nunca estaría de acuerdo! -te quejaste y Marc puso los ojos en blanco.

-¿Por qué querrías hacer eso?

-¡Es la tradición! -te quejaste-. Todos saben eso.

-Nadie hace eso cariño, tal vez un par de personas pero no... -Marc sabía que no tenía sentido discutir contigo. Él sabía mejor.

También sabía que obtendrías todo lo que quisieras, y si querías ir a una boda, lo harías.

[...]

Tu vestido era deslumbrante, te abrazaba perfectamente, haciendo agua la boca de los chicos cuando te vieron, les ajustaste la corbata. Steven estaba balbuceando cuando te vio, una Diosa caminando hacia él, estaba seguro de que había muerto de nuevo.

-Mi Amor -dijo Jake mientras se adelantaba y empezaba a silbar-. Estoy seguro de que podemos llegar un poco tarde -dijo con una voz sugerente. Se inclinó hacia tu oído-. Me estás volviendo salvaje -y justo cuando dijo eso, Steven estaba de regreso.

-Vámonos entonces -dijiste sonriendo mientras te dirigías escaleras abajo para que el taxi te llevara.

La boda estuvo bien. No te gustaba demasiado el blanco que se usaba como decoración, pero definitivamente no era horrible.

-Jenna, felicitaciones -dijiste mientras ponías tu mejor sonrisa falsa para ella, solo estabas allí para la comida y las bebidas gratis y para ver a tus hombres con ese traje que los hacía lucir simplemente divinos-. Este es mi novio, Steven.

-Hola, linda ceremonia, felicidades -Steven fue tan educado como siempre. Con otra sonrisa, tanto tú como Steven se fueron al lugar a buscar bebidas.

Steven, por supuesto, comenzó lentamente, pero ya llevabas dos tragos cuando se llevó el vino a los labios.-Despacio, amor.

-Puedo tomar muy bien el alcohol. Una vez bebí una botella de whisky y apenas lo sentí.

Todavía lograste sorprenderlo incluso después de todos estos meses. Steven miró hacia el techo solo para ver que era un techo de cristal, reflejaba a todos, vio a Marc que le sonrió y negó con la cabeza.

-Por supuesto que lo hizo.

La velada transcurrió bastante bien. Steven estaba sentado, viendo bailar a la gente, incluyéndote a ti.

-Baila con ella -solía decir Marc para alentar a Steven, pero él era demasiado tímido.

-Entonces déjame tomar el cuerpo -Steven escuchó a Jake decir.

-Pero no lastimes a nadie -Steven se aseguró antes de que Jake apareciera.

Estabas bailando, disfrutando de tu tiempo preguntándote cuándo llegará el pastel cuando sentiste un par de brazos muy familiares a tu alrededor. Sonreíste.

-Te estaba esperando~

-Lo sé Mi Amor, te ves deliciosa con este vestido y la forma en que te mueves...

-Me veo deliciosa solo para usted, señor -le guiñaste un ojo y era su momento de sonreír.

-Vamos a salir de aquí.

-No, quiero bailar. ¿Puedo bailar con todos ustedes?

Y tu lo hiciste. Cada uno es tan diferente y los amabas por igual. Jake te estaba abrazando tan cerca, Steven apenas te tocaba y Marc estaba en el medio, tocándote un poco, pero nunca se aferró a ti como lo hizo Jake.

La velada fue agradable, te estabas divirtiendo tanto que olvidaste que estabas en una boda un par de veces.

Incluso lograste llevar a Jake solo al baño de mujeres para pasar un buen rato. Cuando ustedes dos terminaron, sin vergüenza se fue. Todos sabían lo que ustedes dos hicieron allí, pero como si les importara. Necesitabas un poco de aire fresco, así que saliste y te paraste junto al estanque.

Jake te abrazó mientras besaba tu cuello. Fue lindo ver lo sentimental que se puso después del sexo cuando podía ser tan duro contigo.

-Vamos a sentarnos -dijo guiándote a un banco cercano.

Mirabas a la gente hablando, riendo, bebiendo y bailando adentro.

-¿Crees que alguna vez te casarás conmigo?" preguntó Marc, ni siquiera se dio cuenta de lo que acaba de decir, simplemente salió. Lo miraste, atónita-. Quiero decir que ya arruiné un matrimonio, así que no soy bueno en esto, pero... tú eres diferente -te miró, podías ver en sus ojos lo asustado que estaba por tu respuesta.

Siempre decía que no era más que un hombre destrozado, pero sabías que no era cierto. Era amable, gentil e increíble.

-Tendrás que pedírmelo con un anillo. Solo entonces obtendrás mi respuesta oficial. Pero mi respuesta no oficial es la misma que le di a Jake cuando me preguntó hace meses, sí, me casaré contigo.

Marc ni siquiera se sorprendió cuando revelaste que Jake ya te había preguntado.

Captaste a Steven en el reflejo de la ventana mirándolos a los dos, feliz.

-Tal vez la próxima boda a la que asistamos sea la nuestra -dijo Steven mientras te miraba a ti y a Marc.

-Quizás -dejaste escapar un suspiro. Marc se inclinó para darte un beso.

Fue corto y dulce, te hizo sentir especial. Incluso lo sentiste cuando cambió con Steven.

-Amor, están por servir el pastel -Steven dijo que tenía miedo de arruinar el momento.

Pero te pusiste de pie tan rápido que casi le diste un latigazo.

-Vámonos entonces -Extendiste tu mano para que él la tomara mientras les ofrecías una sonrisa.

Tú eras la indicada para ellos, de ahora en adelante estar a tu lado será su vida y futuro.

𝐌𝐀𝐑𝐕𝐄𝐋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora